Paz Interior.Muestra

Paz en la oscuridad.

La mayoría de las personas le temen a la oscuridad. Esa sensación de no poder ver lo que nos rodea nos espanta en muchas oportunidades porque estamos siempre atentos a los riesgos que nos rodean y queremos defendernos si es necesario. La oscuridad limita nuestra habilidad de supervivencia.

La Palabra nos exhorta a que tengamos paz en todo momento y en todo lugar. El Salmista David conocía lo que es andar en temor, era perseguido por su suegro quien deseaba quitarle la vida. Sin embargo, expresa lo siguiente en el Salmos 23:4: “Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento". Aunque estemos rodeados de maldad, aunque nuestros ojos naturales no puedan ver los peligros que nos rodean debemos tener paz porque Jehová Dios está al cuidado de nosotros, nos guía en medio de esas penumbras y nos libra del maligno y sus planes.

Cuando tenemos claro el hecho de que el ser hijos de Dios es sinónimo de cobertura por parte del Padre, vamos a tener una vida más tranquila, caminaremos confiados y nos guardaremos para ser luz y que la oscuridad no pueda adentrarse en nuestro ser. Vamos a ser enormemente bendecidos porque tendremos vallados de ángeles que nos libran de todo mal. El mismo Jesús vivió en medio de un pueblo que le seguía y que dentro de esos seguidores habían personas que solo deseaban ver el momento en que abriera su boca para acusarle y llevarle a la muerte; eso no le detuvo porque siguió con Su misión de predicar las Buenas Nuevas del Evangelio haciendo las obras de amor y misericordia a las que fue encomendado. Sigamos adelante sin importar cuanta oscuridad nos quiera rodear, siempre tengamos presente que el Maestro mismo fue crucificado por amor, ¿estamos nosotros dispuestos a ser señalados por amar al prójimo?

Oremos:

Padre Bueno, te damos las gracias porque siempre estás al pendiente de cada uno de Tus hijos e hijas; Tu Palabra nos dice que aun tienes cuidado de la naturaleza y que mayor es Tu cobertura para aquellos que atrajiste a Tu presencia. En el nombre de Jesús te pedimos que nos des paz en medio de la adversidad, que en todo momento recordemos que Tu favor nos guía, Tu lámpara y Tu fortaleza nos infunden aliento, que aderezas mesa delante de nuestros angustiadores, que Tu vara y tu cayado nos cuidan para continuar marcando la vida de quienes nos rodean con ese mismo amor con que Cristo Jesús actuó todos los días de Su vida, úsanos para poder dar testimonio de que siempre cuidas de Tus hijos y que podamos ver Tu mano poderosa operando a nuestro favor, amén.