Por Más Dura Que Sea La PruebaMuestra

"Realmente hay momentos difíciles"

No podemos tapar el sol con un dedo, hay momentos de prueba que nos llevan a perder la fuerza; pensamos que no vamos a ser capaz de seguir adelante y pronto la duda puede venir a intentar desviarnos de la esperanza que siempre tenemos en Cristo Jesús. 

Mientras sufrimos siendo conscientes que lo que estamos viviendo realmente es una prueba, que no es producto de las consecuencias de haber desobedecido a Dios, porque la experiencia entonces sería muy diferente; podemos llegar a albergar en nuestra mente aquellos dardos de fuego que envía satanás: "estás solo, no saldrás de ésta, a Dios se le acabaron las intenciones contigo, te ha abandonado, te ha desamparado, ¿dónde está tu Salvador ? etc".

Las mismas circunstancias se vuelven una oportunidad de soborno que constantemente nos incita a buscar qué hacer con nuestra propia fuerza, pensando que la solución está en nuestras manos y provocando internamente una mayor angustia al corroborar que nada de lo que podamos hacer funciona. Realmente hay momentos difíciles y en esos momentos podemos contemplar la idea de rendirnos porque sentimos que no podemos más. Sin embargo, es en estos momentos donde más presente debemos tener la Palabra de Dios "no sólo de pan vive el hombre sino de toda Palabra que proviene del Señor". Es cierto, en estos momentos donde sentimos que no aguantamos más, que el sufrimiento es tal que sentimos que las fuerzas se nos acabaron, es donde debemos recordar las promesas que nos ha hecho nuestro Padre. Tenemos que aferrarnos a la esperanza que aunque tengamos toda clase de problemas, no estamos derrotados. Aunque tengamos muchas preocupaciones, no nos damos por vencidos. Aunque nos persigan, Dios no nos abandona. Aunque nos derriben, no nos destruyen, porque así lo ha prometido el Señor y nosotros los hijos de Dios no vivimos por vista sino por fe en aquel en quien somos guardados a pesar de las circunstancias que enfrentamos "en Cristo Jesús", Salvador, pronto auxilio en la tribulación.