Hágase tu voluntad

Cuando le decimos a Dios que haga Su voluntad queremos decir que deseamos que sucedan las cosas como Él las tiene planificadas para nosotros y no de otra forma. Pedir a Dios que haga Su voluntad significa poner Su voluntad primero sabiendo que esta aplicada en nosotros es lo mejor que nos puede pasar. La búsqueda de la voluntad de Dios en la tierra era una forma de vida para Jesús. De hecho, actuar de acuerdo con el plan de Dios fue tan importante para Jesús que dijo: "Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y cumplir su trabajo" (Juan 4:34).

Cuando oramos "hágase tu voluntad", oramos para que Dios cumpla Sus propósitos en nuestras vidas y nos permita vivir como hijos obedientes.

Cuando oramos para que se haga Su voluntad "en la tierra como en el cielo", estamos alineando nuestros deseos con los de Dios.

La voluntad de Dios es siempre, pero siempre buena, es agradable y sin lugar a dudas es perfecta porque Dios es perfecto y nos quiere dar lo mejor.

Debemos comprender que el poner nuestra voluntad por sobre la voluntad de Dios nos hace necios, imperfectos, nos trae consecuencias negativas, siempre nos da soluciones a corto plazo porque miramos a corto plazo y por ende nos transforma en niños caprichosos que piden sin sentido, no pudiendo ver lo que es mejor para nosotros.

Estar buscando Su voluntad permanentemente nos hace estar conectados siempre a Él, crecer en la fe en Él, descansar en Su voluntad, vivir relajados y esperanzados en Él, empezar a creerle a Él y no al diablo. Por último nos impulsa a querer y hacer Su voluntad y no la nuestra.

Propongámonos que nuestra oración en este tiempo sea:

Hágase tu voluntad en mis proyectos.

Hágase tu voluntad en mis emociones.

Hágase tu voluntad en mis sueños.

Hágase tu voluntad en mi familia.

Hágase tu voluntad en mi economía.

Hágase tu voluntad en mis relaciones.

Hágase tu voluntad en ………………………… .

PORQUE SEGURO SIEMPRE SU VOLUNTAD ES MUCHO MEJOR QUE LA NUESTRA.

Pedir con fe y sabiamente es pedir con convicción y fe en lo que queremos y deseamos, anhelando que sea cual fuere la respuesta sea de acuerdo a Su voluntad porque sabemos que así será la mejor respuesta para nosotros.