Creyendo Por Milagros: Señales Y Prodigios. 21 Historias De SalvaciónMuestra

DÍA 5

Al escuchar la palabra “milagro” solemos pensar en sanidad, provisión u otros actos sobrenaturales de Dios. Son eventos en los cuales vemos su mano obrar en nuestras vidas. El Nuevo Testamento usa varias palabras para describir estos eventos mediante diferentes perspectivas. Algunas hablan de señales (sémeion) y poder (dunamis), pero otras hablan de asombro (teras). El significado de esta palabra implica una reacción asombrosa de parte del espectador, un momento extraordinario con efecto sobrenatural sobre los que lo presencian: una maravilla del cielo sobre la tierra.

En Mateo 9 leemos como Mateo fue llamado por Jesús. Momentos antes, Jesús había traído salvación a un paralítico, obrando también con poder para su sanidad (Mateo 9:1-8). Tal fue el efecto de este momento sobre Mateo, que bastó una sola palabra para que tomara la decisión de seguir a Jesús. 

Lo extraordinario de esta historia es que tal y como ocurrió con el paralítico y Mateo, el efecto sobrenatural de este momento de salvación no acabó con la persona que decidió seguir a Jesús.

El milagro de la salvación no acaba con nosotros, más bien comienza ahí. Es un teras con un efecto sobrenatural para los que están a nuestro alrededor. ¿Tenemos esta perspectiva sobre nuestra salvación, una “maravilla del cielo sobre la tierra”?

Oración:


Jesús, gracias por salvarme y darme vida nueva. Llena mi vida de tu gracia para ver a los de mi alrededor sentarse a la mesa contigo y disfrutar del milagro de salvación. En tu nombre. Amén.