Los Diez MandamientosMuestra

LA TERCERA LEY DE DIOS

La tercera ley de Dios tiene un doble significado. “Acuérdate del día de reposo para santificarlo” (Éxodo 20:8) Tiene una aplicación temporal y permanente. Era una restricción temporal del Antiguo Pacto, vinculante solo hasta el tiempo de Cristo, que los sábados debían ser considerados días "sin trabajo". La palabra hebrea Shabbath en realidad significa “descanso”. Los israelitas debían recordar la semana de la creación de Dios y descansar como él descansó el séptimo día.

El Nuevo Pacto eliminó las restricciones de "día". Los cristianos pueden celebrar sus servicios públicos de adoración el día de su elección. La mayoría de las comunidades de culto eligieron el domingo, el día en que el Padre creó la luz, el día en que Cristo resucitó de entre los muertos, el día en que el Espíritu Santo vino con poder en Pentecostés.

La aplicación del Tercer Mandamiento para nosotros hoy podría resumirse simplemente, "Recordar el día de reposo", es decir, recordar y apreciar el dulce gozo, la paz y el descanso que disfrutamos debido al mensaje del evangelio del perdón de nuestros pecados. Recordar el sábado significa apreciar la Palabra de Dios; leerla y escucharla con alegría, regularidad y entusiasmo; celebrando su membresía en la familia de Dios; y levantando palabras y cánticos de adoración.

He aquí cómo recordar el día de reposo: “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales” (Colosenses 3:16).

En Cristo Jesús encontrarás tu Shabbath, tu descanso.