El poder transformador de las EscriturasMuestra

La Palabra es una espada

Mi amigo Ben se dio cuenta de que había dejado su Biblia olvidada cuando estábamos a un estado y medio de nuestra casa. En el afán de empacar y salir por tierra para llegar a un congreso cristiano, nos habíamos alejado de su garaje y su mochila, que contenía la Biblia, se había quedado en el pórtico de la casa.

Para mí, no era gran cosa, ya que regresaríamos a nuestra ciudad dentro de tres días. Sin embargo, para Ben el comienzo de semana sin su Biblia fue un problema significativo.

Mirando hacia atrás, entiendo lo que Ben sintió. Según el apóstol Pablo, usted y yo estamos en una guerra espiritual contra el diablo, el mundo, y nuestra propia naturaleza pecaminosa, una lucha invisible en la que se disparan flechas encendidas contra nuestra alma. No me extraña que Ben quisiera una espada para esa batalla.

«Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios» (Efesios 6:16,17).

Imagine, por un momento, un combate cuerpo a cuerpo sin espada. Un casco y un escudo serían de mucha ayuda, sin duda, pero es difícil ganar una pelea sin una espada. Gracias a Dios porque el Espíritu inspiró a alguien.

La Biblia es la forma como luchamos por las bendiciones de Dios. Cuando el diablo ondea su espada de vergüenza en nuestra garganta, levantamos la Biblia y citamos: «ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús» (Romanos 8:1). Cuando ese antiguo acusador nos hiere en el corazón con la lanza de la duda, paramos el golpe y decimos: «[la palabra de Dios] es la verdad» (Juan 17:17). Cuando el padre de la mentira afirma que estamos demasiado lejos de Dios, decapitamos al engañador con un grito al estilo de Corazón Valiente: «Porque por gracia sois [nosotros somos] salvos». (Efesios 2:8).

Ben no fue un tonto al inquietarse sin su Biblia. Tu tampoco. Toma la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios y manténte firme hoy.