Perlas diarias- Tomando tu corona como hija del ReyMuestra

Día 4: Ámame, No Me Ames

Como: Que tiene las mismas características o cualidades que; similar a.

Amo a las personas! De verdad lo hago! Mi esposo dice que cuando veo a alguien a quien conozco, los 'abrazo obligadamente'. Él me recuerda todo el tiempo que no a todos les gusta abrazar. Bueno, eso es loco en mi opinión. Ese recordatorio gentil vino a la mano cuando recientemente me di cuenta que una de mis 'amigas' no me quería. ¿Qué? Nunca me olvidaré la primera vez que entré a la habitación y me ignoró como a la peste. No tenía ni idea por qué, por eso pasé dos días preguntándome qué podría haber dicho o hecho. Los pensamientos me consumieron y me hicieron sentir ansiosa.

Creo que toda mujer, sin importar su edad, ha experimentado algo parecido. Tomé el teléfono y llamé a una de mis mentoras de oración. Este era el principio del crecimiento un una relación más profunda con Jesucristo. Tanto como amo 'abrazar', también amo 'arreglar'. Quería tomar el teléfono para defenderme y entender por qué la idea de que alguien no me quisiera lastimaba tanto mi corazón. Mi mentora cambió la conversación de 'ella' a por qué el sentimiento de rechazo me consumía a 'mí'.

¿Alguna vez has sentido rechazo o has estado en situaciones sociales incómodas donde no sabes cómo se sienten las demás personas acerca de ti? Empecé un trayecto para darme cuenta que pongo todo mi bienestar y seguridad en otras personas. Ella me direccionó al Salmo 139 'Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón...'. La realidad es que yo nunca le di a Dios la posibilidad de examinar mi corazón porque estaba tratando de entender el de la otra persona. Estaba tan consumida en saber cómo estaba la actitud de su corazón, que estaba ignorando la mía. Cuando oré y entendí que lo que la gente piensa sobre mí es su opinión, mientras yo esté siendo obediente al Señor, entonces esa debe ser mi única preocupación. Dios es mi defensor, pero en el pasado nunca le di una oportunidad para defenderme. Quiero animarte a abrir el libro de Salmos y leerlo en voz alta. Comenzarás a ver que puedes tener la disciplina del silencio porque Dios pelea por ti.

Como empiezas este día, quiero que le pidas a Dios que 'examine tu corazón'. El rechazo duele, pero eso no te define; tu Padre Celestial sí.

Oración Diaria:

Padre Celestial,

Oro para que a medida que avanzo a lo largo del día me recuerdes cuánto me amas. Hay personas allá afuera que me aman también, así como hay algunas que no. Ayúdame a concentrarme en aquellos que me aman y apoyan, aquellos que has puesto en mi vida para animarme y acercarme a Ti. Ayúdame a encontrar valor en nuestra relación solamente. Eres el único que nunca me dejará ni desamparará. En el nombre de Jesús.

Con amor,

Tu Hija

No olvides tu corona hoy!