Desarrollando Líderes JóvenesMuestra

Los Tiempos de Dios

Otras áreas de desarrollo para un líder emergente son las oportunidades de servir a los demás y obedecer el tiempo de Dios. Si el éxito llega antes que el líder esté listo, los resultados podrían ser perjudiciales para la vida espiritual de él/ella y también para el corazón y el alma del ministerio. Pedro pensó que estaba listo para morir con Cristo cuando en realidad estaba lleno de temor y vergüenza. Cristo, sin embargo, reveló la verdad que había en el corazón de Pedro, pero también vio lo que llegaría a ser. «Pero yo he rogado en oración por ti, Simón, para que tu fe no falle, de modo que cuando te arrepientas y vuelvas a mí fortalezcas a tus hermanos» (Lucas 22:32, NTV). Pedro no estaba listo, aunque había andado con Cristo a diario; pero cuando vino el cambio, se convirtió en una fuerza poderosa en el reino de Dios. Ejemplo de ello lo encontramos en el capítulo dos de los Hechos.

En la universidad tenía un maestro que siempre nos decía “el éxito sucede cuando la preparación se encuentra con la oportunidad”. Era un constante recordatorio que si queríamos ser exitosos en nuestra carrera y futuros proyectos necesitábamos reconocer el tiempo de preparación presente y no menospreciarlo sino aprovecharlo.

Yo creo que es importante saber reconocer los tiempos de Dios. Habrán tiempos de ser una semilla enterrada, tiempos de esperar, tiempos de aprender y crecer, tiempos de germinar y tiempos de dar fruto. Considero imprescindible el saber aprovechar cada tiempo para recibir todo lo que Dios destinó para nosotros en cada etapa del proceso. Así seremos buenos administradores de todo lo que Dios nos dé.