Semana SantaMuestra

“Lunes Santo” Esta famosa frase que repetimos una y otra vez en la iglesia, fue pronunciada por Jesús la semana previa a su crucifixión. Con su muerte próxima, también Jesús veía próximo el comienzo de la iglesia. Una nueva era, en la que el peso y el privilegio de representar el Reino de los Cielos en la tierra ya no estaría sobre unos pocos escogidos, sino sobre todo aquel que clamase en su Nombre. Jesús quería asegurarse de que sus seguidores tenían clara la autoridad que tendrían para llevar a cabo esa misión. Si creemos sin dudar, podemos deshacernos de cualquier obstáculo que haya en nuestro camino. Da igual que sea un monte imponente, podemos quitarlo de en medio con la declaración firme e inmovible de nuestros labios. El problema es que, muchas veces, dudamos de que Dios realmente pueda hacerlo. Preferimos escalar en nuestras propias fuerzas esas montañas, dejando de lado nuestra misión y dañándonos en la imposible misión de vencer por nosotros mismos los obstáculos de esta vida. Quizás te encuentras hoy en medio de una de esas escaladas, en medio de intentar por ti mismo vencer a tus situaciones más imposibles. Toma unos minutos para pausar y analizar tu vida. Si ves un monte… levanta tu oración, y con toda la fe que puedas hallar en tu corazón (basta que sea como una semilla de mostaza) pronuncia: FUERA, QUÍTATE, abre paso… tengo una misión. Allanemos el terreno para una semana de salvación sobre nuestro precioso país, preparemos nuestras manos y espíritu para nuestra misión, y que todo lo demás desaparezca a nuestro paso.