7 Cosas Que Recordar Cuando La Vida Parece DifícilMuestra

2. Dios es tu guía cuando no sabes a dónde ir.

En ocasiones nos encontramos en situaciones en que no sabemos para dónde ir. ¿Qué decisiones tomar? ¿Qué hacer?

Hay muchos momentos donde nos gustaría tener un GPS para saber que dirección tomar; en el que buscamos un guía que nos indique hacia donde transitar.

¿Qué puedo hacer para salir de donde me he metido? ¿Cómo puedo solucionar esta relación familiar rota? ¿Debo emprender un negocio o buscar empleo? ¿Cómo puedo mejorar mi situación económica? ¿Qué puedo hacer con esta adicción? ¿Qué puedo hacer con este hijo rebelde? ¿Qué puedo hacer para tratar esta enfermedad? ¿Cómo puedo superar el duelo por la pérdida de una persona?

Cuando te sientas agobiado, en medio de la duda, sin saber a dónde ir, recuerda lo que dice David: Dios te guiará y dirigirá (Salmo 31:3).

El salmista declara que Dios es nuestro Eterno Dios, y que siempre nos guiará (Salmo 48:14).

A menudo oramos pidiendo la dirección de Dios cuando tenemos decisiones difíciles que tomar. En muchas ocasiones cuando estamos perdidos necesitamos o un mapa, o un guía. Un mapa que nos muestre las señales y las direcciones y un compañero constante que conozca el camino como la palma de su mano y que se asegure de que interpretamos bien el mapa. La gran bendición es que Dios nos ha provisto de ambos: la Biblia será siempre ese mapa y el Espíritu Santo nuestro compañero y guía constante.

La Biblia es una lámpara que guiará tus pasos y será una luz en tu camino (Salmo 119: 105), mientras que el Espìritu Santo que mora en ti (1 Corintios 6:19) te guiará a toda verdad (Juan 16:13).

Por eso, cuando no sepas a dónde ir, encomienda a Dios tu camino y Él te guiará (Salmo 37:5).