Reyes

El diccionario define así a los reyes: generalmente es un cargo heredado y propio de muy pocas familias privilegiadas. Es el soberano y máxima autoridad de un pedazo de tierra incluyendo grandes naciones.

Tengo un muy buen amigo que creció en la iglesia, tomó los valores cristianos como su estilo de vida y sin darse cuenta ha trabajado toda la vida para no solo sentarse con los reyes sino serlo. Es un apasionado por levantar una generación que ame a Dios pues sirve a los niños en la iglesia. Y fuera de ella, literalmente no solo le daba la mano al presidente sino que trabajó hombro a hombro con él.

Lo admiro porque así actúa un rey en las manos de Dios. Gobierna, actúa, deja el nombre de Dios en alto, demuestra que con valores cristianos se puede ser referente en una sociedad que en un grito mudo expresa su necesidad del Salvador. Mi amigo sabe que es el PBI y también la NVI (Producto Bruto Interno y Nueva Versión Internacional). Es el tipo de cristiano que no le tiembla la voz para expresar sabiduría ante personas “importantes” y a la vez agacharse para abrazar a un niño.

Eso es un rey en las manos de Dios, alguien que puede ejercer influencia sobre otros sin importar si es un mandatario o si es el más pequeño, un niño. Es una persona que permea en los sistemas del mundo los valores de un hijo de Dios sin dejarse afectar, es como una oveja en medio de lobos y no teme el terror nocturno. Sirve al pueblo sin dejar a un lado el templo. ¿Te identificas?