Quiero De Esa AguaMuestra

DEBEMOS ELEGIR EL AGUA DE VIDA ETERNA -PARTE 1

Cuando la mujer escucha a Jesus hablar de un agua que salta para vida eterna, ella inmediatamente le dice: Espera, ¿cómo me ofreces un agua mejor que la que me dejó Jacob? Acaso tú eres mas grande que Jacob?

Y aquí hay dos escenarios, dos opciones. Está la opción que siempre has tenido, lo conocido, el agua del pozo que tradicionalmente siempre has tomado, y está el agua que te brinda Él que está llamando a la puerta. Ella le hizo una pregunta de Sí o No a Jesus. Si me hacía esa pregunta a mí, yo de inmediato comenzaba a presumir: "¿NO ME CONOCES? SOY EL MESÍAS, SOY EL VERBO HECHO CARNE, EL ENVIADO. Pero, la respuesta de Jesus fue contundente, SIMPLEMENTE DIJO: "El agua que tienes, la que dejó Jacob, cualquiera que la beba, volverá a tener sed. Pero el agua que te ofrezco, quien la beba, nunca más tendrá sed".

Tenemos dos opciones, tenemos el agua del pozo de nuestra realidad, de nuestra experiencia, de nuestro mundo, de nuestro sistema, que si seguimos tomándola, volveremos a tener sed. Pero hay un agua que te ofrece Aquel que está llamando a la puerta, que si decides tomarla, nunca más tendrás sed.