[Serie Conoce a Jesús] El Poder Del Nombre De JesúsMuestra

Hacia el siglo IV a.C. los judíos dejaron de pronunciar el nombre de Dios, Yahweh, y comenzaron a utilizar en su lugar la palabra hebrea Adonai que significa “el Señor”. Esto hizo que la versión griega del Antiguo Testamento (la Septuaginta) empleara el equivalente griego (Kyrios) en lugar de Yahweh.

En este sentido, tanto en Éxodo 3:14 como en Éxodo 6:3, Dios revela Su nombre a Moisés: YHWH. Tradicionalmente, este nombre ha sido escrito como Yahweh al agregársele vocales. YHWH (y su interpretación como el “Yo soy”) tiene como raíz la palabra hebrea que significa “existir”. De este modo, el significado del nombre es “Yo existo” mas que “Yo soy”. Por ello podemos decir que Dios no tiene principio ni creación ni fin ni terminación. Él existe desde la eternidad hasta la eternidad, nadie lo creó sino que Él es el Creador de toda la creación material y espiritual. Dios simplemente es. Y, en Jesucristo, Dios creó todas las cosas (Col. 1:16-17).

La referencia de Éxodo 3:14 fue tomada y utilizada por Jesucristo para referirse a Sí mismo en Juan 8. Allí, Jesús se revela a Sí mismo como el gran YO SOY que ya existía antes de Abraham. Él es el mismo ayer, hoy y por los siglos (Heb. 13:8). Su existencia es continuada e inmutable. Jesucristo no cambia.

Este nombre de Jesucristo no solo prueba Su naturaleza divina (tanto Él como el Padre emplean el mismo nombre) sino que también es una fuente de seguridad y confianza para el creyente. Así como el Señor Jesús no cambia, Sus planes y propósitos para nuestras vidas tampoco. En Él podemos vivir confiados.

Para Reflexionar:

¿Qué te genera saber que Jesucristo es Eterno y que nunca cambia? ¿Cómo impacta esta afirmación bíblica en tu vida?

Oración:

Amado Cristo, ¡qué paz me da el saber que Tú no cambias! En Ti puedo vivir seguro sabiendo que Tus planes para mi vida se cumplirán. Amén.