ResistentesMuestra

Aprende de las correcciones.  

Aprender de las correcciones, esto no siempre le va a gustar a nuestra carne, pero es lo más sabio. La Biblia nos enseña que el padre que ama a su hijo lo corrige. Nuestros padres terrenales nos corrigen cuando hacemos algo que según la experiencia que ellos tienen, no está correcto. Aunque la mayoría del tiempo los padres hacen la corrección pensando en lo mejor para nosotros, a muchos hijos no les gusta esa corrección (me ha pasado), la mayoría de las veces va en contra de lo que queremos y por eso no nos gusta que lo hagan.   

Quienes te aconsejan son representantes de Dios en tu vida. Cuando desprecias el consejo o la instrucción, de una forma u otra estas menospreciando el consejo de Dios en tu vida. Podemos ver en Proverbios 8:14, como la sabiduría dice que suyo es el consejo. El único que puede dar sabiduría es Dios, por tanto, los consejos que llegan a nuestra vida para alinearnos aunque no nos gusten vienen directamente de Él. 

Las situaciones y circunstancias que ahora estás atravesando son la preparación para aquello que Dios tiene para ti. Sino soportas la preparación y/o el entrenamiento no estarás listo para lo que Dios quiere hacer contigo.  

Dichas situaciones son las que nos capacitan para que aprendamos a mantenernos de pie cuando llegan las turbulencias. Esas mismas situaciones son las que nos corrigen; aunque no lo creamos cuando recibimos una corrección. Estos momentos son los que forman nuestro carácter, los momentos incómodos son los que revelan si nos consideramos hijos o huérfanos.  

Mi consejo es que evalúes lo que te están aconsejando esos representantes que Dios ha puesto en tu vida y así puedas ser sabio en todos tus caminos.

¿Por qué te resistes tanto a mejorar?