Orando fervientemente.Muestra

Orando fervientemente.

  Hoy en día muchos se han extraviado de las bases fundamentales de la vida cristo céntrica; vemos personas oprimidas que no dejan ir las pesadas cargas que llevan por el temor; esa esclavitud puede ser rota en el Nombre de Jesucristo cuando buscamos a Dios con fervor, con pasión.

  Un elemento clave que deberíamos retomar en todo tiempo es el poder de la oración ferviente; recordemos lo que la Palabra nos dice en Santiago 5:17-18 “17 Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. 18 Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.” Vemos como un ser humano, común y corriente, sujeto de pasiones como nosotros y en una lucha en sí mismo pudo buscar el rostro de Dios en oración y sucedió un gran milagro.

  La diferencia que podemos ver entre la mayoría de las personas y Elías radica en su fervor para orar; es importante analizar esta característica para que logremos acrecentar nuestra relación con el Padre y nuestras oraciones suban con olor fragante grato delante del Trono de Dios y veamos cosas maravillosas suceder en nuestra vida, familia, amigos, vecinos; que todos ellos sientan el poder de Dios fluir como lo sintió todo el pueblo de Israel cuando Elías oró y se detuvo la lluvia y luego volvió a orar y la lluvia volvió a caer sobre la tierra.

  Te invito para que en los próximos días nos adentremos en la Palabra para ver que es una oración con fervor y poder y que la podamos practicar cada día y ver la poderosa mano de Dios operando en nuestra vida; pidamos la revelación del Espíritu Santo en oración: amado Padre, en el Nombre de Jesucristo nos presentamos delante de tu Trono para darte las gracias porque sabemos que siempre escuchas nuestras peticiones, porque siempre tienes cuidado de nosotros y has provisto a tu maravilloso Espíritu Santo para que nos guíe a toda fuente de Verdad y de Justicia; te pedimos que nos reveles de tu Palabra para que aprendamos a orar como tu siervo Elías; que el poder manifiesto tuyo fluya a través de nosotros, que seamos un instrumento poderoso en tus manos para que todas las personas puedan ver que eres maravilloso, sublime y que nada es imposible para ti; amén.