Romanos: Teología Para Todos (12-16)Muestra

Cuando Jesús vino a la tierra, vino como un hombre judío, hablando hebreo, celebrando fiestas judías, comiendo comida judía y cantando canciones judías. Los primeros discípulos y seguidores de Jesús eran judíos y compartían la misma cultura que él. Después de la resurrección de Jesús de entre los muertos y el derramamiento del Espíritu Santo, muchos gentiles no judíos se convirtieron en seguidores cristianos de Jesús, lo que llevó a una larga lista de preguntas sobre qué cosas eran culturales y qué cosas eran bíblicas. Los ejemplos incluyen el libro de Gálatas donde se les dijo a los gentiles que no necesitaban ser circuncidados, y 1 Corintios donde se les dijo a los gentiles que ya no podían emborracharse, asistir a servicios religiosos paganos además de la iglesia, tener relaciones sexuales fuera del matrimonio heterosexual.

Lo mismo sucede cada vez que el evangelio de Jesucristo pasa de una cultura a otra, o de una subcultura a otra. Los Misiólogos llaman a esto “contextualizar” cuando la iglesia cristiana vive en el contexto de una cultura y tiene que determinar qué mantener y qué rechazar en esa cultura. Esto es precisamente lo que Pablo está enseñando, un líder misionero apostólico que ha plantado iglesias y ha sido usado por Dios para alcanzar a las personas a través de una variedad de culturas.

Con mucha frecuencia, los cristianos de una cultura dominante imponen toda su cultura junto con la Biblia a una cultura recién alcanzada. El resultado es algo que se llama colonialismo y no es lo que Dios quiere, ya que no hay cultura en la tierra que sea perfecta y digna de una emulación completa. Por esta razón, en 14:17, Pablo tiene la única referencia al Reino de Dios en todo el libro de Romanos. Todos los cristianos deben mirar hacia el Reino de Dios para ver cómo Jesús reina y gobierna hoy en el reino invisible y lo hará para siempre cuando regrese a gobernar la Tierra, conectando los reinos visibles e invisibles. Esto es lo que significa vivir Bajando el Reino, teniendo al Rey Jesús como nuestra máxima autoridad y Su Reino como la cultura que buscamos emular, para que Su Reino venga y Su voluntad se haga en la tierra como en el Cielo, tal como Él oró. Para ayudar al pueblo de Dios a navegar por varios problemas culturales, Pablo nos recuerda que nuestra conciencia (un concepto que introdujo en Romanos 2:12-16) debe ser considerada para que cada creyente viva dentro de sus convicciones personales. En diversos temas, las personas son lo suficientemente fuertes para usar su plena libertad en Cristo sin pecar, mientras que en otras áreas las personas son débiles e incapaces de usar su plena libertad en Cristo sin pecar. Todos somos débiles y fuertes en diferentes áreas.

Los tipos de cuestiones culturales a las que se refiere Pablo se debaten constantemente entre los cristianos. Los ejemplos incluyen la celebración de Navidad, Halloween y la Pascua, que tienen todos sus orígenes en el paganismo. Diversos entretenimientos, desde películas hasta canciones y videojuegos, junto con libros y programas de televisión. Tendencias de moda desde estilos de ropa hasta joyería y maquillaje para mujer. Problemas de género con respecto a cómo se visten y se presentan los hombres y las mujeres ante los demás. La lista es aparentemente interminable.

Para ayudar a los cristianos a pensar en varios temas sobre este tipo de asuntos, he usado una taxonomía simple durante muchos años que parece ser muy útil:

1. Recibir – hay algunas cosas en la cultura que los cristianos simplemente pueden usar, lo que explica por qué la mayoría de las iglesias tienen un sistema de sonido junto con aire acondicionado fabricado por incrédulos; tener un sitio web alojado por incrédulos en Internet que es administrado por incrédulos; cantar, orar y predicar en el idioma de su nación, que es predominantemente incrédulo; y recibir todos estos avances tecnológicos para tratar de promover la causa del evangelio de Jesucristo.

2. Rechazar – hay algunas cosas en la cultura que los cristianos simplemente deben rechazar, lo que explica por qué no tenemos pornografía cristiana, cárteles de drogas cristianos, clases de escuela dominical transgénero, matrimonio entre personas del mismo sexo o reuniones de oración con sectas y otras religiones.

3. Redimir – hay algunas cosas en la cultura que pueden usarse contra Dios, pero también pueden redimirse para Dios. Un ejemplo es Santa Claus[JFM2] . Dado que la Navidad y Santa son un gran punto de debate y desacuerdo entre los padres cristianos, el siguiente es un resumen de cómo los cristianos han redimido a ambos. Dado que Santa es tan omnipresente en nuestra cultura, es casi imposible simplemente rechazar a Santa como parte de nuestro paisaje cultural anual. Aún así, como padres que crían a nuestros cinco hijos, no sentimos que pudiéramos simplemente recibir la historia completa de Santa porque hay muchos mitos construidos sobre una historia real.

A medida que nuestros hijos crecieron, les dijimos a nuestros hijos que Santa era una persona real que vivió hace mucho tiempo. Explicamos cómo, además de la historia real de Papá Noel, se han agregado muchas otras historias (por ejemplo, renos voladores, vivir en el Polo Norte, entregar regalos a todos los niños en una noche) para que Papá Noel sea una combinación de verdad e historias de fantasía.

Sin embargo, no demonizamos a Santa. Vestirse, divertirse y usar la imaginación que Dios dio puede ser un acto de adoración en santidad y es algo que, francamente, muchos adultos necesitan aprender de los niños.

Por otro lado, lo que nos preocupa es mentirles a nuestros hijos. Les enseñamos que siempre pueden confiar en nosotros porque les diremos la verdad y no les mentiremos. Por el contrario, les pedimos que sean honestos con nosotros y nunca mientan. Dado que también les enseñamos a nuestros hijos que Jesús es una persona real que realizó milagros reales, nuestro temor es que si les enseñamos historias fantásticas y ficticias como verdad, podría erosionar la confianza en nuestra veracidad donde realmente importa. Entonces, distinguimos entre mentiras, secretos, sorpresas y fingir para nuestros hijos. Les pedimos que no mientan ni guarden secretos, pero sí les enseñamos que algunas sorpresas (como dar regalos) y fingir (como disfrazarse) pueden ser divertidas y deben ser alentadas. 

Los mitos grandiosos que rodean a Santa Claus en realidad emanan de la persona muy real de San Nicolás. Los registros antiguos de su vida son escasos, pero las diversas piezas se pueden juntar como un mosaico.

Nicholas nació en el siglo III en Patara, un pueblo en lo que hoy es Turquía, en el seno de una familia acomodada, pero sus padres murieron trágicamente cuando él era bastante joven. Lo habían criado para ser un cristiano devoto, lo que lo llevó a gastar su gran herencia en ayudar a los pobres, especialmente en dar regalos a los niños.

Quizás su acto de bondad más famoso fue ayudar a tres hermanas. Debido a que su familia era demasiado pobre para pagar el dote de su boda, tres jóvenes cristianas se estarían enfrentando a una vida de prostitución hasta que Nicolás pagó su dote, salvándolas así de una horrible vida de esclavitud sexual.

Se convirtió en un líder cristiano muy querido y finalmente fue elegido obispo de Mira, una ciudad portuaria que el apóstol Pablo había visitado anteriormente (Hechos 27:5-6). Según los informes, Nicolás también viajó al legendario Concilio de Nicea, donde ayudó a defender la deidad de Jesucristo en el 325 d.C.

Tras su muerte el 6 de diciembre de 343, fue canonizado como santo. Este aniversario se convirtió en una festividad cuando se entregaron obsequios en su memoria, que finalmente se fusionó con la Navidad, ya que se celebraban con unas semanas de diferencia.

Durante la Reforma, sin embargo, Nicolás perdió el favor de los protestantes, quienes no aprobaron canonizar a ciertas personas como santas y honrarlas con días festivos. Su fiesta no se celebró en ningún país protestante excepto Holanda, donde vivió su leyenda como Sinterklass. En Alemania, Martín Lutero lo reemplazó con el niño Jesús como objeto de celebración navideña o, en alemán, Christkindl. Con el tiempo, la celebración del niño Jesús se pronunció simplemente como Kris Kringle y, curiosamente, se convirtió en un nombre más para Santa Claus.

Las leyendas sobre Santa Claus son probablemente una recopilación de otro folclore. Por ejemplo, en la época de Nicolás existía el mito de que un demonio entraba en las casas de las personas para aterrorizar a los niños y que Nicolás lo expulsaba de la casa. Este mito puede explicar por qué finalmente se creyó que bajaba por las chimeneas de la gente.

Además, existía un mito siberiano (cerca del Polo Norte) de que un hombre santo, o chamán, entraba en las casas de las personas a través de sus chimeneas para dejarles hongos como regalo. Los colgaba frente al fuego para que se secasen y, según los informes, los renos se los comían y se intoxicaban y podían volar. Este mito puede haberse fusionado con el mito de Santa Claus.

Estas historias de Santa Claus fueron traídas por primera vez a Estados Unidos por inmigrantes holandeses. A principios del siglo XX, las tiendas comenzaron a tener regalos de Papá Noel para los niños durante la temporada navideña. Los niños también comenzaron a enviar cartas al Polo Norte a medida que crecían las leyendas que rodeaban a un hombre cristiano por lo demás simple.

En resumen, San Nicolás fue un hombre maravilloso que amó y sirvió a Jesús fielmente. Entonces, con gusto lo incluimos en nuestras tradiciones navideñas para recordarnos cómo es que alguien viva una vida de devoción a Jesús como Dios. Nuestros hijos nos agradecen por ser honestos y divertidos, lo cual creemos que es lo que Jesús quiere mientras intentamos redimir a Santa.

Preguntas:

1. ¿Hay algo en lo que estás participando que debas rechazar porque es impío, viola tu conciencia o no aumenta tu fe en la relación con Dios? ¿Cómo ocurrirán estos cambios?

2. ¿Hay personas a las que estás causando que caigan en el pecado por tus acciones o la presión que les pones? ¿Cómo puedes disculparte con ellos y empezar a ayudar en lugar de obstaculizarlos?