La Dosis DiariaMuestra

Si el sueño es una parte importante del descanso de nuestros cuerpos, mentes, espíritus y almas, la alimentación es una parte igualmente importante. Cuando se producen temporadas de estrés, caos y actividad, a menudo nos olvidamos incluso de comer. Alimentar nuestros cuerpos, el templo del Espíritu Santo, con un estilo de vida saludable es muy importante. A veces las circunstancias y otros factores hacen que la alimentación saludable sea difícil, y los desórdenes alimenticios son muy reales. Afectan a muchas personas, por lo que obtener ayuda profesional y asesoramiento en esos casos es realmente positivo y recomendable. Pero una alimentación sana y una mentalidad sana en torno a la alimentación son sólo algunas de las formas en que nos nutrimos. Nuestra salud digestiva informará a nuestra salud mental, que a su vez informará a nuestra salud espiritual. También se nos anima a nutrirnos con la Palabra de Dios. En tiempos de crisis y caos, necesitamos recordar las herramientas que se nos han dado para atravesar las temporadas difíciles. Jesús estaba en el desierto hambriento, cansado y puesto a prueba por el mismo Diablo. En ese momento, buscó en lo profundo de sí mismo la escritura que memorizó. Recordó la Palabra de Dios y se apoyó en esa verdad para superar ese desafío y esa temporada de incertidumbre. Cuando prestamos atención a la Palabra de Dios, somos capaces de escuchar el alimento que Él nos está dando para la siguiente parte de nuestro viaje.

Preguntas:

• ¿Qué versículo o versículos has estado leyendo en la Palabra que han surgido repetidamente?¿Qué crees que Dios te está hablando a través de estas escrituras?


• Tómete un tiempo esta semana para memorizar las escrituras. ¿A dónde te está llevando Dios en la Biblia?¿Cómo puedes aplicar esta escritura esta semana?