El Verdadero ÉxitoMuestra

Los discípulos habían caminado con Jesús por un tiempo, habían visto a Juan y posiblemente a otros maestros enseñar a sus discípulos. En repetidas ocasiones el texto bíblico nos dice que Jesús se retiraba a orar, en otras ocasiones lo hacía con dos o tres de sus discípulos.

Es interesante que es hasta este momento, uno de sus discípulos le pide que le enseñe a orar. Recordemos que Jesús era judío y sus discípulos también, sabían orar desde muy temprana edad, lo hacían en la casa, a diferentes momentos del día, porque era parte de sus rituales religiosos del día, lo podemos encontrar en el libro de Daniel y los otros libros antes de Jesús, pero ¿Por qué este discípulo consideró que necesitaba orar?

El texto bíblico solo nos da algunas pistas, las oraciones de Jesús eran diferentes, primero se apartaba, Jesús no oraba solo para los alimentos o porque la religión lo pedía en los tres momentos que mandaba la ley; Jesús se retiraba cada mañana o cuando estaba cansado. Jesús mostró con su oración una completa dependencia del Padre; mostró a sus discípulos que toda decisión debía ser tomada a los pies del Padre.

Jesús le enseña a sus discípulos lo que conocemos como «El Padre Nuestro», como las palabras correctas para dirigirse al Padre y si hiciéramos un esquema de esa oración, se puede ver la confianza ciega y dependencia total. La invitación de hoy es, este es el momento de aprender a orar como lo hacía Jesús.