Buenos MayordomosMuestra

“La condición de su corazón”

Ciertamente nuestra mayordomía revela la condición y el afecto de nuestro corazón. La cantidad de diezmo u ofrenda no es lo más importante; sino la condición del corazón. No se trata de cuán impresionante sea nuestro trabajo o la abundancia de nuestro servicio, sino el motivo y la intención detrás de lo que hacemos; si lo hacemos para ser vistos y alabados, o si lo hacemos con humildad y por amor a Dios y a otros.

En Lucas 21:1-4 encontramos un buen ejemplo: “Levantando los ojos, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca de las ofrendas. Vio también a una viuda muy pobre, que echaba allí dos blancas. Y dijo: En verdad os digo, que esta viuda pobre echó más que todos. 

Porque todos aquéllos echaron para las ofrendas de Dios de lo que les sobra; mas ésta, de su pobreza echó todo el sustento que tenía”. 

En lo que respecta al dinero, esta viuda estaba en un lugar de pobreza; pero su mayordomía era evidencia de un corazón saludable. No fue la cantidad de su ofrenda lo que cautivó la atención; sino la condición de su corazón. Ella no tenía mucho para dar, pero dio sacrificialmente y su ofrenda reflejó claramente la condición de su corazón.

¿Estaremos nosotros dispuestos a sacrificarnos por lo que valoramos? ¿Es usted un asistente pasivo o un participante activo? Todos tenemos los tesoros de tiempo y dinero. ¿Dónde están sus tesoros? Es allí donde encontrará su corazón.