Una Navidad desde el pesebreMuestra

No es ninguna casualidad que los pastores aparezcan en la escena navideña. Para un nacimiento tan humilde, Dios no planeó traer a los reyes con más poder del reino, mas bien escogió a personas ordinarias; pero en la imagen completa tiene todo el sentido.

A través de este acto, no solo da valor a las personas que socialmente tienen menos repercusión, sino que también está pincelando de manera simbólica el camino de Jesús: el Buen Pastor.

Si vuelves a leer el versículo 8 de Lucas 2, te muestra que los pastores “velaban y guardaban” a su rebaño en la noche. La función de un pastor de ovejas es guiar al rebaño, además de buscar pastos donde puedan alimentarse.

Fíjate además qué imagen: los pastores van a dar la bienvenida al Cordero que sería el perfecto sacrificio.

¡Wow!

Pero el asombro no acaba aquí.

Resulta que además de Cordero, ese niño del pesebre sería el Pastor de todas las ovejas, guiando, velando, guardando y alimentando a su rebaño.

Y, ¿sabes? ante toda esta maravilla, el versículo 16 nos cuenta que los pastores de la región fueron “apresuradamente”.

Me hace pensar en la de veces que nosotros vamos apresuradamente en direcciones contrarias a Dios. Pero los pastores tuvieron esa emoción al ir a ver a Jesús.

De nuevo: ¡Wow!

Y a ti, ¿qué es lo que te emociona estas navidades?