El Curso PrematrimonialMuestra

Conflicto

Esperando conflicto

El conflicto es inevitable en una relación.

El problema no es si estaremos en desacuerdo; el problema es cómo lidiamos con los desacuerdos. Lo realmente importante para cada pareja es tener las herramientas y habilidades para resolver conflictos de manera constructiva.

Manejando la ira

La ira no es mala por si misma; es como mostramos nuestra ira lo que puede ser dañino en una relación.

Dos animales nos muestran dos formas de manejar la ira de manera inapropiada y de poca ayuda:

• Rinocerontes: se dejan ver que están enfadados de inmediato, van al ataque


• Erizos: tienden a esconder su ira -- es probable que se calmen y se retiren

Tanto los rinocerontes como los erizos tienen que aprender a expresar lo que les molesta de forma verbal y tranquila.

Buscando soluciones juntos

Cuando tienes un desacuerdo:

• reconocer que en el matrimonio realmente estáis del mismo lado


• buscar una solución juntos que haga bien a vuestra relación


• estar listo para pulsar el «botón de pausa» cuando sea necesario(preguntaros a vosotros mismos: «¿Es un buen momento?» y «¿Es un buen lugar para mostrar este desacuerdo?»)

Cinco pasos para encontrar una solución

1. Identificar y centrarse en el problema que causa el conflicto.
   
   Tomad el tema que está causando conflicto entre vosotros. Ponedlo frente a vosotros y trabajad en ello juntos.


2. Utiliza declaraciones en primera persona
   
   Evita el etiquetado (por ejemplo: ‘Tu siempre…’ / ‘Tu nunca…’). Describe tus sentimientos (por ejemplo ‘Me siento molesto por…’).


3. Escucharos unos a otros
   
   Intenta entender y valorar la perspectiva del otro. Turnaros para hablar.


4. Pensad en posibles soluciones
   
   Hablad sobre diferentes posibilidades. Puede ayudar escribir una lista.


5. Elige la mejor solución para ahora y revísala más tarde
   
   Si la solución que intentas no funciona, prueba otra de la lista. Si no podéis encontrar una solución juntos, pide ayuda.

Proceso de curación del dolor

El dolor es inevitable en todo matrimonio, y este dolor debe curarse para que nuestra relación prospere.

Hay un proceso de curación simple pero poderoso:

1. Habla sobre el daño
   
   Dile a tu pareja cuando te haya molestado. No te aferres al dolor ni permitas que la autocompasión y el resentimiento se acumulen dentro de ti. 


2. Di lo siento
   
   Nuestro orgullo puede dificultarnos pedir perdón. Disculparse significa asumir la responsabilidad por nuestras palabras o acciones incorrectas. Pedir perdón abre el camino a la reconciliación.


3. Perdona
   
   El perdón es la fuerza más grande de curación en un matrimonio. 

El perdón NO es:

• olvidar el dolor que pasaste


• fingir que no importa


• no confrontar el comportamiento injusto e hiriente de nuestra pareja

El perdón ES:

• enfrentar el dolor que se nos ha hecho


• reconocer las emociones internas


• elegir el no acusar a nuestra pareja de la ofensa


• renunciar a la autocompasión y al deseo de venganza.

El perdón es ante todo una elección, no un sentimiento.

• el perdón es un proceso -- a menudo tenemos que seguir eligiendo perdonar (a veces diariamente). A medida que lo vamos haciendo, gradualmente los recuerdos del dolor pesan menos y tienen menos poder sobre nosotros.