Convirtiéndome en el líder que Dios quiso que fueraMuestra

Introducción

Nuestro mundo necesita hoy más que nunca líderes sabios, fuertes, con principios y empáticos. Necesitamos líderes individuales en iglesias y ministerios que den prioridad a las personas. Gerentes y ejecutivos que lideren empresas y organizaciones sin fines de lucro con integridad. Padres que cuiden y capaciten a la próxima generación de líderes “en el camino que deben seguir” (Proverbios 22:6). 

Las innovadoras ideas del experto en empresas Peter Drucker sobre el liderazgo y las economías sociales se adelantaron a su tiempo. Su amplio conocimiento sobre el ámbito laboral en evolución, ha instruido a muchos de los líderes más influyentes y exitosos del mundo en una variedad de organizaciones, desde benéficas hasta mega corporaciones. Sus valiosas palabras han impactado a líderes de todo el mundo, incluido el equipo de OneHope, y son válidas para cualquiera que busque profundizar sus propias habilidades de liderazgo.

Día 1

Hacer crecer mi liderazgo personal

Todo líder tiene algo en común: busca mejorar constantemente. Esto no es cierto solo en el mundo de los negocios, sino que se aplica a todos los ámbitos, desde planificadores financieros hasta médicos, pintores, asistentes legales, cuidadores de mascotas, padres, ¡y todo lo demás!.

Hay sabiduría atemporal que se puede obtener de expertos prácticos y probados como Peter Drucker, pero la Biblia también tiene mucho que decir sobre el liderazgo. 

Primero, conócete a ti mismo 

“Siempre que la gente está en camino hacia el éxito”, dijo Drucker, “tiende a pensar en la modificación del enfoque como algo que hacer si fracasan. Pero yo diría que deberías modificar tu enfoque cuando tienes éxito, porque es cuando te lo puedes permitir”.

Jesús habla mucho sobre saber quién eres y hacia dónde vas.

Más de 18 veces en la Biblia, Jesús dice: "Yo soy" y luego da una descripción. Se describe a sí mismo como la puerta, el pan de vida, el camino, la verdad, la resurrección y la vida. Una y otra vez, Él se define a sí mismo. Descubres quién eres sabiendo de quién eres.

Jesús sabía quién era y también por qué estaba aquí.

“Pues he descendido del cielo para hacer la voluntad de Dios, que me envió, no para hacer mi propia voluntad”. Juan 6:38 (NTV)

Mientras oras hoy, profesa tu identidad en Cristo y afirma la misión que Él te ha dado.