Sentirse mejor: Devociones de Tiempo de Gracia Muestra

Mi Mente: Tengo tanto miedo

El presidente Benjamín Harrison y su esposa llevaron la electricidad a la Casa Blanca en 1889, pero le tenían tanto miedo que les ordenaban a los sirvientes que encendieran y apagaran los interruptores, si los sirvientes ya se habían ido a dormir, los Harrison dormían con las luces encendidas.

Una cosa es ser prudente en todo lo que es peligroso, como cuchillos afilados, venenos y electricidad; pero una cosa muy diferente es permitir que la mente se consuma en un miedo irracional. ¿Cómo está el nivel de miedo en su mente? ¿Alguna vez el temor básico se ha convertido en terror en su mente? ¿Cuál es el contenido de sus pesadillas? ¿Estar solo? ¿El fracaso en los negocios? ¿La infertilidad?

Tal vez sea de utilidad mencionarlos en este momento. ¿Su temor es algo que usted puede controlar, o es algo que está fuera de su control? Si hay algo que usted pueda hacer al respecto, establezca un plan y haga lo que tiene que hacer. Si es algo que está fuera de su control, ¡ese no es problema suyo!

Puede ser de Dios. A él no le molesta de ninguna manera que usted acuda a él con cosas que son mucho más grandes que usted. “Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; Como con un escudo lo rodearás de tu favor” (Salmo 5:12).Mi Mente: Tengo tanto miedo

El presidente Benjamín Harrison y su esposa llevaron la electricidad a la Casa Blanca en 1889, pero le tenían tanto miedo que les ordenaban a los sirvientes que encendieran y apagaran los interruptores, si los sirvientes ya se habían ido a dormir, los Harrison dormían con las luces encendidas.

Una cosa es ser prudente en todo lo que es peligroso, como cuchillos afilados, venenos y electricidad; pero una cosa muy diferente es permitir que la mente se consuma en un miedo irracional. ¿Cómo está el nivel de miedo en su mente? ¿Alguna vez el temor básico se ha convertido en terror en su mente? ¿Cuál es el contenido de sus pesadillas? ¿Estar solo? ¿El fracaso en los negocios? ¿La infertilidad?

Tal vez sea de utilidad mencionarlos en este momento. ¿Su temor es algo que usted puede controlar, o es algo que está fuera de su control? Si hay algo que usted pueda hacer al respecto, establezca un plan y haga lo que tiene que hacer. Si es algo que está fuera de su control, ¡ese no es problema suyo!

Puede ser de Dios. A él no le molesta de ninguna manera que usted acuda a él con cosas que son mucho más grandes que usted. “Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; Como con un escudo lo rodearás de tu favor” (Salmo 5:12).