No Tengas Miedo: Devociones del Ministerio Tiempo de GraciaMuestra

Tengo miedo del rechazo

Un par de chicas a las que invité a salir durante mis años de universidad me dijeron que no. ¿Por qué recuerdo todavía tan claramente esas ocasiones? ¿Por qué persisten después de todos esos años aquella vergüenza y esa duda de mí mismo? Porque el rechazo duele.

No tengo que preguntarle, usted también ha sido aguijoneado por el rechazo, ¿no es así? ¿Fue usted el último que escogieron para integrar el equipo? ¿Sus niños han rechazado sus creencias y su sistema de valores? ¿Ha sufrido el abandono de un ser amado o de su cónyuge? ¿Lo han despedido alguna vez de un empleo?

¿Sabe cual es una pesadilla aún peor? El temor de que Dios ya no tenga un uso más para usted. Todos le hemos dado a Dios razones más que suficientes para que se aparte de nosotros con desagrado y termine definitivamente con nosotros. “Sión decía: ‘El Señor me abandonó, mi Dios se olvidó de mí’” (Isaías 49:14).

Eso es lo que usted debería esperar; eso es lo que merece. Sin embargo, la realidad es que su relación con Dios no se basa en su desempeño, sino en el de Cristo; no se basa en sus conclusiones, sino en el sacrificio de Cristo; no se basa en sus temores sino en el amor de Dios.