Gracia Sin CondenaciónMuestra

La respuesta sabia de Jesús

Luego de la pregunta de los religiosos, Jesús responde con una acción enigmática: se inclina y, en silencio, escribe en el suelo.

Él no responde nervioso, ni siquiera detiene su discurso frente a la gente diciendo: "Bueno, disculpen, nunca nos pasó esto en vivo y en directo". Al contrario, se toma su tiempo para responder. De esa manera, Jesús muestra que quienes dirigen la escena no son los acusadores sino Él mismo, y su actitud muestra que no tiene nada que temer.

Hay varias sugerencias acerca de lo que escribe en el suelo:

• Los pecados de los acusadores.
• Las palabras de Éxodo 23,1: “No te concertarás con el pecador para testimoniar en favor de una injusticia”.
• O simplemente unos signos sin un sentido preciso; de todas maneras, el enigma acerca de lo que Jesús escribió permanece, pues no se puede hacer sino conjeturas al respecto. Por otra parte, cabe pensar que si lo que escrito hubiera sido algo importante, no se hubiera dejado así sin saber.

Y ante la insistencia de los religiosos, Jesús se levanta y da su parecer. No niega que la ley de Moisés dice que hay que apedrear a la mujer, pero les responde con una palabra que ellos conocían muy bien y la gente de la época también. La palabra griega utilizada en el texto para "AQUEL" es una palabra que habla de inocencia en contraposición del pecador, pero en este contexto significaba “inocente en sentido general y no solo de la culpa de adulterio”. Lo que Jesús dice no es una simple palabra, es un mandamiento, que pide juzgar a los demás, en este caso la mujer sorprendida en adulterio, después de haberse juzgado a sí mismo.

Y se vuelve a agachar para escribir en el suelo. Esta acción, que aparentemente es sin sentido, en realidad les estaba diciendo algo: Jesús ya había dado su parecer, ahora Él deja el protagonismo de la escena, y ahora les tocaba a los religiosos elegir cómo seguía la situación.

Pregunta disparadora para el lector: ¿Cómo crees que podemos interpretar la acción de Jesús al escribir en el suelo y cómo podría influir en nuestra forma de tratar a los demás y a nosotros mismos en situaciones de pecado?