La Serie De Las 4 Criaturas Vivas Parte 3: El HombreMuestra

Recuperarse

Los traumas pueden paralizar la vida de una persona. A quienes han sufrido cualquier forma de abuso les suele resultar difícil recuperarse. Al mirar una vez más la vida de Jesús, pensemos en la crueldad y la traición que sufrió. Fue golpeado y azotado públicamente hasta quedar irreconocible. La misma multitud que solía aclamarlo, era la misma que lo quería muerto. Despojado, golpeado y clavado en la cruz, murió como un criminal, a pesar de ser inocente. Clama a su Padre Celestial porque se siente abandonado y, sin embargo, no hay respuesta. Así que allí yace colgado Jesús. Solo.

Resucita, y su misión principal es mostrarse a las mismas personas que huyeron en su momento de necesidad. Nuestra tendencia humana sería apartarnos de todo el mundo casi indefinidamente, pero Jesús nos muestra que la verdadera prueba de sanación es cuando puedes ser el faro de esperanza para los demás, a pesar de lo que hayas pasado. Lo que sea que hayas experimentado en la vida, puede haber sido extremadamente doloroso. Sin embargo, en la humanidad de Jesús, Él todavía nos muestra el camino para ayudar a traer sanación a otros que también pueden estar sufriendo su propio nivel de trauma.

La muerte de Jesús había afectado negativamente a sus discípulos. El dolor se había apoderado de ellos, por no hablar de las horribles escenas que María tenía en su mente repetidamente. Ella fue testigo de la tortura de su hijo, y no pudo hacer nada para salvarlo. El pueblo necesitaba sanación, y Jesús era quien la traía. Si tú has obtenido la victoria sobre un problema, sabe que eres el que Dios usará para ministrar a aquellos que se están ahogando en la desesperación. Tu vida rota e imperfecta es la herramienta que Dios usará para relacionarse con alguien que no tiene a quién acudir. Cuando surja esa oportunidad, ¡aprovéchala! Otras personas dependen de tu testimonio y de tu aliento. Recupérate del trauma y sé un vaso de sanación para los que sufren.