Deja la queja atrás

"¿Hasta cuándo tendré que sobrellevar a esta congregación malvada que murmura contra mí? He oído las quejas de los hijos de Israel, que murmuran contra mí" (Números 14:27).

Israel se quejaba porque habían dejado de ser esclavos y según ellos siendo esclavos en Egipto vivían mejor, comían mejor. Ellos al no reconocer sus bendiciones y ser agradecidos por haber sido liberados, solo podían expresar quejas por todo.

¿Cuántas veces nosotros hemos sido desagradecidos? Nos quejamos durante el día porque no tenemos lo que otro tiene, porque la comida no nos gusta o quizá con las personas que convivimos no son o no se conducen como nosotros quisiéramos, se nos olvida que tenemos la bendición de un techo, de alimento y de que nuestros seres queridos estén con nosotros. Dejamos de agradecer a Dios por todo lo que hace por nosotros y solo pedimos todo aquello que sentimos que nos hace falta y que según nosotros necesitamos y cuando no lo tenemos, entonces nos quejamos y no dejamos de murmurar cómo el pueblo de Israel. ¿Sabes? Dios está escuchando cada una de tus palabras, muchas de ellas son quejas o murmuraciones, hablas de lo que te falta y no de lo que tienes, siempre queremos más. Eso no es malo siempre y cuando recordemos que toda buena dádiva viene de Dios y que a Él debemos agradecer todo lo que tenemos y dar gracias en todo momento.

Tienes salud o estás enfermo agradece, tienes abundancia o escasez agradece, recuerda que todas las cosas ayudan para nuestro bien. Hoy cuando la queja llegue a tu mente no la dejes salir por tu boca, cámbiala por un sincero agradecimiento. Dale gracias a Dios por la persona difícil que está a tu lado, por la comida que tienes en el plato, por el problema que estás viviendo, porque en cada momento ¡Dios está obrando para tu bien! Deja de quejarte eso no cambiará nada, empieza cambiando la forma en que hablas o tratas a los demás, disfruta más el tiempo que tengas a las personas contigo o el tiempo que tú estés con ellas. Piensa lo mejor de todo, piensa en sus cualidades y no en cada defecto, piensa en lo que es verdadero, en lo que es agradable, es ahí, en tu mente donde comenzarás a ganar la batalla contra la queja.

Cuando la gratitud remplaza a la queja entonces tus ojos podrán ver todas las bendiciones qué hay delante de ti. ¡Vive dando gracias cada momento por todos y por todo!

Pensando en...

Cuando Dios está conmigo no hay problema, circunstancia , necesidad que no sea para mi bien. Cuando Dios está conmigo no hay muro que se levante de duda, tristeza, decepción que no sea derrumbado, la queja se va y en mí hay un gozo que me fortalece, cuando soy débil en el soy fuerte, no digo no puedo, porque en Cristo todo lo puedo, no digo no tengo, porque Él es mi Pastor y nada me falta.

Si caigo Él me levanta, si fallo Él me perdona y su amor no deja de ser, su amor es incondicional. Si no se que hacer, que camino tomar, el Espíritu Santo me guía, me capacita, me da sabiduría y paz.

¡Gracias mi Dios, mi Señor! Porque tu siempre estas conmigo.

Oración

Hoy Dios te pido perdón por todas las veces que me he quejado de todo lo que hay a mi alrededor, de las personas y de las cosas, he dejado de ver cada bendición que tú me has dado por mi falta de gratitud. Señor ayúdame a cambiar la queja por agradecimiento y que cada día pueda ver y pensarlo mejor. Gracias Dios por todo lo bueno que tú me das siempre. En el nombre de Jesús, amén.