Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Información del Plan

Dios no te ha olvidadoMuestra

Dios no te ha olvidado

DÍA 2 DE 5

ENFRENTANDO EL TEMOR AL ABANDONO

¿Cuál es uno de tus temores? ¿A qué le tienes miedo?

Tal vez pueda ser que uno de tus temores sea a ser olvidad@, a ser abandonad@, a la soledad. Dios conoce cada uno de tus temores pero Él desea que seas honest@ y no ocultes lo que Él ya ha visto. En lo personal, una noche Dios me reveló uno de los temores que tenía, este temor tuvo raíz en mi niñez cuando por un momento desperté y llorando busqué a mis papás por toda la casa y la casa se encontraba vacía, pensaba que me habían abandonado.
Cuando crecí me di cuenta de que tenía un temor a ser abandonada, no podía creer que algo que duró algunos minutos me había generado ese temor que creía ya no existía. Hasta que al relacionarme con otras personas sentimentalmente fuera de mi ámbito familiar me di cuenta de que el temor al abandono estaba presente, tenía tanto miedo que no podía dejar ni soltar, repetía patrones tóxicos en los que insistía y me aferraba a las personas. Esto afectó mi salud mental, emocional y física, gracias le doy a Dios que desde ese momento ha estado trabajando conmigo y sanando mi corazón. Y es que este temor suele ignorarse y no reconocerse hasta que se genera una dependencia con un fuerte apego emocional en el que se pierde la libertad, no te valoras y haces lo que esté en tus manos para no ser abandonada. Luego cuando esto ocurre, comienzas a creer que hay algo malo en ti, comienzan a venir mentiras a tu mente en donde te menosprecias y te culpas por ese abandono. Así que reconociendo lo que conlleva todo esto desde este entendimiento y enseñanza que Dios me ha mostrado quiero hablarte sobre ello y no hay mejor manera que iniciando con Jesús.

Jesús fue abandonado, y Él entiende este temor que tal vez tú también has experimentado a causa de alguna vivencia en tu niñez o en alguna etapa de tu vida. Jesús fue rechazado y abandonado aún cuando era Dios, perfecto, dulce, misericordioso, manso, humilde, todo amor... Esto nos demuestra que la causa del rechazo y el abandono no era porque Jesús hubiera hecho algo malo. De la misma forma algunas veces esto nos llega a suceder. En Juan 6:66-67 se nos narra que muchos de los discípulos de Jesús volvieron atrás, lo abandonaron. Me encanta que sea cual sea la situación que estemos atravesando podemos identificarnos con Jesús y aprender de Él.


Sin duda alguna Jesús también experimentó el dolor del abandono así que en este plan devocional no vengo a decirte que nunca serás abandonad@ por el hombre, porque no es así; las personas pueden irse con la intención o sin la intención, con el paso del tiempo y al finalizar una etapa o temporada, las personas se pueden alejar de nosotros aun cuando pueden hacernos promesas de que siempre estarán con nosotros o que nunca nos dejarán. Sin embargo hay algo que siempre debes recordar y que al recordarlo te dará fuerza, ánimo y plenitud para continuar y poder vencer esos temores y es el amor de Dios y Su fidelidad a Sus promesas.

Antes de ir a la cruz Jesús les dijo a Sus discípulos que ellos lo dejarían solo. Jesús sabía que aún Sus discípulos iban a abandonarlo y serian dispersados pero también sabía que no estaba solo, que el Padre estaba con Él. Es necesario que cada día recuerdes esto.

Dios nos ha prometido que Él no nos dejará ni nos abandonará, Jesús lo dijo antes de partir, conociendo ese sentimiento y necesidad en nosotros nos prometió a Su Espíritu Santo.


Cada una de las promesas de Dios son diferentes a todas las que tal vez te hicieron algunas personas y no las cumplieron, Dios quiere recordarte que Sus promesas siguen en pie y que Él sí cumple, Él no miente.


Cuando sentimientos de soledad y de abandono vengan, o cuando el temor quiera invadir tu mente, lleva todo pensamiento cautivo en obediencia a Cristo, somete todo sentimiento y pensamiento a Cristo, a la verdad. Corre a Sus promesas y desecha la mentira. Nunca estarás sol@ porque Dios prometió estar contigo todos los días de tu vida, cuando te levantes, cuando te acuestes, cuando salgas y cuando entres Su presencia irá contigo, no te dejará ni te abandonará. Aprecia, valora, experimenta y recuerda Su presencia y Su compañía todos los días de tu vida.

Oración:

Gracias Jesús porque puedo identificarme contigo y aprender de ti. Gracias Padre porque nunca me has dejado, aun cuando otros me han abandonado tú no lo has hecho, gracias por tu amor y por tu fidelidad, gracias por la compañía de tu Espíritu Santo, por la preciosa promesa de que estarás conmigo todos los días hasta el fin del mundo. Hoy desecho toda mentira y me aferro a la verdad de tu Palabra. Hoy soy libre del temor al abandono y a la soledad por el poder de tu presencia en mi vida, Espíritu Santo gracias gracias gracias Dios.Te pido que traigas sanidad a mi corazón. En tu nombre Jesús. Amén.




Día 1Día 3

Acerca de este Plan

Dios no te ha olvidado

Existen temporadas en nuestras vidas en las que nos sentimos olvidados por Dios. Este plan es un recordatorio para ti de que Dios no te ha olvidado y jamás lo hará. En el silencio aparente de tus oraciones o en los monte...

More

Nos gustaría agradecer a Fátima Meza por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://linktr.ee/soyfatimaa

YouVersion utiliza cookies para personalizar su experiencia. Al usar nuestro sitio web, acepta nuestro uso de cookies como se describe en nuestra Política de privacidad