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Florecimiento: 21 días para que el Fruto del Espíritu florezca en tu vidaMuestra

Florecimiento: 21 días para que el  Fruto del Espíritu florezca en tu vida

DÍA 3 DE 21

El amor es un llamado

Por Josh Morris

Te pido que todos sean uno, así como tú y yo somos uno, es decir, como tú estás en mí, Padre, y yo estoy en ti. Y que ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste.(Juan 17:21 NTV).

Nuestros teléfonos vibraron al mismo tiempo, y mi esposa, Hannah, y yo miramos nuestras pantallas de mala gana, asumiendo que sería algo del trabajo o que a lo mejor los niños necesitaban algo de nosotros. Pero al momento siguiente, nos dimos cuenta de que no era eso en absoluto. Acabábamos de ser invitados a visitar a unos amigos y quedarnos en su casa —¡en St. Croix, Islas Vírgenes! Amamos mucho a estos amigos y habríamos ido a visitarlos a cualquier parte, pero también estábamos muy emocionados de pasar un rato en la playa.

Mientras estábamos en St. Croix, Hannah y yo nos integramos en la familia y la vida diaria de nuestros amigos. Experimentamos uno de los mejores y más agradable viajes en los que hemos estado, y mientras reflexionaba sobre el ello en el vuelo de regreso a casa, me di cuenta de que habíamos presenciado algo muy especial.

Para empezar, me di cuenta de que, si bien yo realzaba la vida en la isla, la verdad es que nuestros amigos son muy trabajadores. Sí, hacían buen uso de la belleza que los rodeaba, pero también tenían que superar muchos obstáculos e inconvenientes para establecer una vida allí que damos por sentado aquí en casa. Es una familia de trabajadores extremadamente dedicados, y la vida isleña relajada que había imaginado estaba lejos de la realidad. Estaban en una batalla diaria como todos los demás que conozco. El mismo tipo de batalla con la que todos estamos familiarizados: una en la que estás creando tu vida y las cosas no son fáciles.

La segunda cosa de la que me di cuenta es que en medio de la rutina diaria, y especialmente con el aislamiento que a menudo conlleva la vida en la isla, nuestros amigos priorizan a la familia de una manera que nunca olvidaré. Cada miembro de su familia tiene una personalidad fuerte, y difieren en sus pensamientos y creencias y, a veces, chocan, como es común en todas las familias. Sin embargo, la prioridad de todos siempre permanece centrada en la familia y en ayudarse mutuamente. Los observé mientras se sentaban a la mesa y hablaban de temas difíciles y aun así tenían la certeza absoluta de que eran familia y de que nada se interpondría entre ellos. Son una familia mezclada, pero nunca lo adivinarías por la forma en que se aman y se cuidan. Su compromiso con la familia se trata precisamente de eso: compromiso. No es condicional, y debido a eso, existe la confianza de que se amarán y se apoyarán mutuamente a pesar de los pequeños desacuerdos que puedan tener.

No se equivoquen, vivimos en una época duramente divisiva, y el mundo ha llegado a conocer íntimamente el amor condicional. Un minuto eres amado, y al minuto siguiente eres odiado simplemente porque tus puntos de vista difieren de las opiniones de otra persona. Esta cosmovisión tóxica reitera el sentimiento de que el amor es condicional y si te equivocas o no estás de acuerdo con alguien, podrías perderlo todo.

No hay duda de que nosotros, como creyentes, estamos llamados a amar al mundo y mostrarles cómo es el amor de Cristo. Y eso ciertamente ayuda a remediar este frágil amor que existe a nuestro alrededor. Pero hay una oración, y solo una: Jesús oró para que podamos responder. En Juan 17:20–23, Jesús oró para que todos nosotros, como creyentes, fuéramos uno con los demás así como Él es uno con el Padre. De hecho, Él dice que cuando fomentamos este tipo de unidad entre nuestros hermanos en la fe, se erige como el testimonio de que Jesús es Dios y fue enviado por el Padre.

Este es un llamado severo y debemos tomarlo mucho más en serio. La forma más rápida y efectiva de destruir un movimiento o un grupo de personas es hacer que luchen internamente para que se pudran por dentro. Entonces, cuando los atacas, no hay unidad para fortalecerlos contra el ataque. Esto es lo que ha hecho la Iglesia en los últimos años, ya que nos hemos dividido en más y más subcategorías de creencias. Ahora, a menudo nos distinguimos no en las formas en que somos diferentes del mundo secular, sino en las formas en que somos diferentes unos de otros. Falta gravemente la unidad en la Iglesia, y debido a esto, no estamos respondiendo fielmente a la oración que Jesús hizo por nosotros.

Mientras observaba a nuestros amigos cuidar de su familia y encontrar formas de expresar su amor sin importar el desacuerdo temporal, me di cuenta de que eran un verdadero testimonio para mí de cómo es el amor de Cristo. Son un grupo de personas que se aman bien y mantienen a la familia como una prioridad sobre todo lo demás. Tal vez nosotros, como Iglesia, podamos aprender de su ejemplo en esta época. Tal vez podríamos empezar a ver a los creyentes como miembros de la familia y siervos del verdadero rey. Solo tal vez, si podemos llegar allí, podemos comenzar a responder la oración que Jesús hizo por nosotros. Esta será la señal para los incrédulos y lo que nos separará del mundo. Es una cosa llamada amor, y estamos llamados a ser ministros del amor para que todos sepan cuán fuerte es realmente el amor de Cristo. Supera todas las cosas. Hoy, elijamos y mostremos al mundo quién es Dios.

Oración

Señor, te pedimos que nos des la fuerza para amar a nuestra familia de creyentes aun cuando no sea algo natural, que resistamos la tentación mundana de seguir dividiendo, y en su lugar nos demos el ministerio de la reconciliación. Que podamos responder a Tu clamor por la unidad aquí en la tierra así como en el cielo. En el nombre de Jesús, amén.

Para mayor reflexión

  1. ¿A qué amigos, familiares o figuras públicas miras como ejemplos del amor de Dios? ¿Qué palabras o acciones específicas te atraen hacia ellas?
  2. ¿Cómo puedes abordar con amor temas potencialmente difíciles?
Día 2Día 4

Acerca de este Plan

Florecimiento: 21 días para que el  Fruto del Espíritu florezca en tu vida

Este devocional de 21 días está lleno de verdades bíblicas y estimulantes historias sobre cómo el Espíritu Santo produce amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio en tu vida....

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Nos gustaría agradecer a Gateway Church por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://gatewaydevotions.com/

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