El Dios que RestauraMuestra

Confía en Su fidelidad

Lectura: Salmos 13

Devocional: Salmos 13:5–6 NVI

Pero yo confío en tu gran amor; mi corazón se alegra en tu salvación. Canto salmos al Señor. ¡El Señor ha sido bueno conmigo!

En el texto

David, el autor del Salmo 13, compartió su dolor. Al igual que Habacuc, no rehuyó de sus profundos sentimientos cuando hablaba con Dios. David se sentía ignorado por Dios, como si Dios se hubiera negado a escuchar sus oraciones y gritos de ayuda. Sentía que Dios lo había dejado solo para preocuparse y sufrir, con sus enemigos regodeándose en él. Clamó a Dios, rogándole que lo mirara y respondiera.

Esta oración honesta nos muestra la calidad de la fe de David. David se dirigió a Dios en su dolor, esperando una respuesta y recordando la fidelidad de Dios. David anhelaba ver la liberación del Señor, y prometió regocijarse y alabarlo cuando fuera restaurado.

¿A qué te enfrentas en esta temporada? ¿Te sientes abandonada o ignorada por Dios? ¿Te encuentras en una temporada de regocijo y alabanza a Dios por Su fidelidad? O, tal vez, estás enfrentando ambas cosas. Tal vez sientes pérdida y dolor, pero también puedes reconocer la provisión, la sabiduría, la protección y el cuidado de Dios.

El Adviento es una temporada de recuerdo y de espera. Durante el Adviento, recordamos las promesas de Dios: Él prometió enviar un libertador para salvar a Su pueblo del pecado y la muerte, y prometió regresar para restaurar el mundo y reinar como Rey. Nosotras esperamos que Dios cumpla Su promesa: Él fue fiel en el pasado y cumplió Su promesa de enviar a un Mesías, y Él será fiel en el futuro cuando Jesús regrese.

Nuestro Dios es fiel. Nada pasa desapercibido para Él. No importa el dolor que sintamos o la alabanza que proclamemos, Él siempre está con nosotras. Cuando el pueblo de Dios esperaba al Mesías, Dios guardó silencio durante cuatrocientos años. El pueblo se sintió ignorado por Dios, incluso olvidado. Pero Él estaba llevando a cabo Su plan perfecto en Su tiempo perfecto. Él no te está ignorando. Él no te está negando nada. Él está trabajando en formas que tú no puedes ver o entender, incluso ahora, en tu situación presente. Y más que eso, Él está trabajando de maneras increíbles e invisibles para llevar a cabo Sus propósitos para el momento perfecto cuando Jesucristo regrese. ¡Nosotras podemos confiar en Él!