Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Información del Plan

Un Dia MejorMuestra

Un Dia Mejor

DÍA 2 DE 7




El peor día.

¿Cuál fue el peor día de tu vida? Yo sé cuál fue el mío. Es el día en que me enteré de que el bebé por el que mi esposo y yo habíamos orado había muerto. Era nuestro tercer aborto espontáneo en fase avanzada y me sentí devastada. No podía afrontar de nuevo ese dolor, esa pérdida y esa tristeza. Nuestro hermoso bebé se había ido. Lloramos juntos, y el dolor que sentíamos era insoportable.

Quizás tu peor día fue antes de conocer a Cristo. Si fue así, ya conoces esa desesperación abrumadora que se siente y te cuestionas si alguna vez se acabará el sufrimiento. Aunque estemos inmersos en la peor clase de dolor, tú y yo sabemos que todavía hay esperanza. No importa cuán lejos la sintamos, sabemos que tenemos un Dios que nos ama y nos consolará.

En cambio, sin Jesús, no existe realmente ninguna esperanza. ¿Acaso conoces a alguien que esté sufriendo de esa manera en este momento? Imagina el pánico de no saber cuándo acabará su dolor, o si alguna vez se acabará. Tal vez sus peores días tengan que ver con la muerte de un ser querido, un diagnóstico impactante o la desesperanza demoledora del dolor crónico.

Este tipo de dolor jamás es agradable. No importa la forma en que intentamos consolarnos, no importa la forma en que intentamos prepararnos, la muerte y el dolor nos hacen sentir muy mal. ¿Por qué?

La muerte y el dolor nos hacen sentir mal porque están mal. El sufrimiento desgarrador de este mundo hace estragos en nosotros. No fuimos creados para algo así, porque hay algo mejor para nosotros, para ti y para aquellos que Dios ha elegido para tu vida.

Fuimos creados para la vida y el crecimiento.

Fuimos diseñados para progresar.

Fuimos formados para tener una alegría desbordante.

El pecado contaminó todo en esta vida en la tierra. Sin embargo, Dios nos abrió un camino cuando Jesús vino y murió en la cruz. Él cargó con el pecado y el dolor de este mundo. Él cargó sobre sí mismo con todo lo que está mal en toda la tierra.

Lo más misterioso es que no permaneció muerto. ¡Esa es la victoria! Venció a la muerte. ¡Cuánto poder y autoridad! Jesús rompió el poder de lo único que ningún ser humano puede controlar, la muerte. Pedro nos dice en la Biblia que Cristo sufrió por nuestros pecados una vez y para siempre. Nunca pecó, sino que murió por los pecadores, para conducirnos sanos y salvos a la casa de Dios. Tuvo una muerte física, pero fue vivificado por el Espíritu.

Amigo, esta es nuestra esperanza; esta es mi esperanza. Sé que un día, cuando este cuerpo muera, el Espíritu me hará revivir en un nuevo cuerpo celestial y volveré a casa con Dios. Sé que volveré a ver a mis bebés, y ya estoy deseando que llegue ese momento.

Apocalipsis 21 dice que un día Él enjuagará toda lágrima de los ojos. Ya no habrá muerte, ni llanto, ni lamento ni dolor, porque las primeras cosas han dejado de existir. ¡Dios hará nuevas todas las cosas! Qué maravilla, todo lo que se perdió se restaurará. No veo la hora de que llegue ese día.

Sin embargo, hoy me gustaría preguntarte: ¿crees que estas promesas son para que las cumplas tú mismo? ¿O crees que Él murió para llevar esta esperanza prometida a todas las personas? ¿Crees que Él quiere consolarnos a todos en nuestro dolor? ¿Acaso perdiste el entusiasmo por compartir el mensaje de esperanza de Dios al ver lo quebrantado que está el mundo?

Quizás estés preguntándote: si Jesús venció a la muerte, ¿por qué sigue existiendo la muerte? Si Él venció al pecado, ¿por qué sigue existiendo el pecado? ¿En verdad puedo afirmar que Dios es bueno? La Biblia nos dice que, aunque el pecado y la muerte han sido vencidos, todavía no han sido eliminados por completo de la tierra. ¡Pero lo serán!

La primera vez que Jesús vino a nosotros, lo hizo como siervo, dando su vida en rescate por muchos (Mateo 20:28). Pero la Biblia nos dice en 1 Corintios 15 que, al final de la historia de nuestra tierra, Jesús volverá. Vendrá a reinar como nuestro Rey victorioso, expulsando todo lo malo de la tierra. Dice que reinará hasta que haya puesto a todos sus enemigos bajo sus pies y que el último enemigo en ser destruido es la muerte.

Podemos esperar Su regreso con gran esperanza, pero también podemos tener esperanza para hoy.

Dios sigue siendo fiel, sigue siendo bueno. Tenemos buenas noticias, ¡y vale la pena compartirlas! En Jesús, hoy podemos tener:

Una paz que no depende de nuestras circunstancias.

El Espíritu Santo nos llena de una esperanza que no defrauda.

Nuestras vidas quebrantadas se restauran día a día.

Su presencia reconfortante ha comenzado a curar las heridas más profundas de nuestros corazones.

Para el presente, Él nos sostiene con Su amor.

Para el futuro, tenemos la hermosa promesa de la próxima vida.

Pero, ¿qué pasa con los que no tienen esta seguridad que los consuela? Amigo, el Señor nos ha encomendado compartir este maravilloso don que nos han concedido. Hay personas a tu alrededor que deben saber que su dolor no tiene por qué durar eternamente.

Como dice el Salmo 30, "Si por la noche hay llanto, por la mañana habrá gritos de alegría". Y Jesús es la luz de la mañana que por fin expulsará todo nuestro dolor.

Tienes una esperanza que vale la pena compartir, y puedes elegir presentar a Jesús a tus amigos, familiares, vecinos y compañeros de trabajo. Comienza a hablar hoy mismo, ¡para que el corazón de tu amigo se llene con la mayor esperanza!

¿Quieres orar conmigo?

Gracias porque prometes enjuagar todas mis lágrimas, porque prometes la vida eterna. He tenido días terribles, Señor. Pero hoy me pongo en tus manos amorosas. Me aferro a tu esperanza y a tus promesas. Ayúdame a compartir la esperanza que me has dado con quien pueda. Un día te veré cara a cara, e incluso ahora estás conmigo, trayendo nueva vida. Quiero proclamar tu bondad aún en los momentos de dolor de la vida. En tu nombre, Jesús. Amén.

Día 1Día 3

Acerca de este Plan

Un Dia Mejor

No podemos disimular lo que nos pasa, algo no anda bien. Todos los días nos despertamos teniendo que soportar todo tipo de dolores; luchamos para consolarnos. Sin embargo, tenemos la certeza de que vienen días mejores; l...

More

Nos gustaría agradecer a Luis Palau Association por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://luispalau.net/

YouVersion utiliza cookies para personalizar su experiencia. Al usar nuestro sitio web, acepta nuestro uso de cookies como se describe en nuestra Política de privacidad