Daniel: Una Vida Consagrada a DiosMuestra

No te confundas cuando estés en el foso de los leones

Hacer las cosas bien y conforme a la voluntad de Dios, en ocasiones se vuelve un problema para todos aquellos que sienten que sus intereses pueden verse afectados, por supuesto que esto también incluye al príncipe de este mundo, Satanás.

No siempre seremos amados o/y aceptados, Jesús fue despreciado, menospreciado y no estimado; siendo el hijo de Dios, por lo que nosotros formando parte de su cuerpo también lo vamos a padecer.

Todos veían en Daniel un espíritu superior, por lo que el rey Darío pensó en colocarlo sobre todo el reino; causando la molestia de los gobernadores y sátrapas de aquel lugar.

Cuando el enemigo no encuentra la manera de inmiscuirte en los placeres de este mundo, buscara la manera de tenderte una trampa con las cosas que haces para Dios; esto fue lo que le sucedió a Daniel y que en ocasiones nos sucede a nosotros también.

Fue acusado de incumplir el edicto que le impediría orar por treinta días; muchos dirán, pero que le costaba esperar ese tiempo; la verdad es que la base de nuestra comunicación con Dios es la oración y esto era fundamental en la vida de Daniel, como lo debe ser en la nuestra.

El oraba tres veces al día y no dejo que ningún edicto se lo impidiera, siendo arrojado al foso de los leones; aquellos que lo acusaron nunca imaginaron que esta sería la circunstancia que exaltaría el nombre de Dios en todas las naciones, sin mencionar que todo el mal que desearon a Daniel se revirtió en sus vidas.

Por lo que en este día, te recomendamos que coloques la oración y el servicio a Dios, por encima de todo y el tendrá cuidado de ti en todo tiempo.