Una Perspectiva Bíblica Sobre El Trabajo Y El DescansoMuestra

El trabajo debe ser valorado y recompensado

El texto de Levítico trata de la relación entre un empleador y su empleado. En muchas situaciones, el empleador tendrá más dinero y más poder o autoridad que el trabajador contratado. Pero esto nunca debería llegar a la opresión o la explotación. 

Labán explotó a su yerno Jacob. Jacob trabajó para él más de veinte años, pero Labán trató de engañarlo todo el tiempo. Entonces, Dios le dijo a Jacob que lo dejase. Esta situación de injusticia no debería durar por siempre. 

Dios valora grandemente la justicia y la misericordia, no importa cuál sea nuestra posición social. Tener una alta posición nunca es una excusa para explotar a otros. Ésto se enfatiza en Deuteronomio 24:14-15: “No te aproveches del empleado pobre y necesitado, sea este un compatriota Israelita o un extranjero. Le pagarás su jornal cada día, antes de la puesta del sol, porque es pobre y cuenta solo con ese dinero. De lo contrario, él clamará al Señor contra ti y tú resultarás convicto de pecado”. La mayoría de nosotros probablemente no estamos en posición de contratar trabajadores y pagar a los empleados un sueldo diario. Pero todos somos de alguna forma parte de un sistema económico que podría ser más o menos justo.

¿Cómo podría aplicarse el texto bíblico de hoy a tu situación? ¿Cómo podrías contribuir a la justicia económica?