Vida AbundanteMuestra

Día 1

El ladrón no viene más que a robar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia. (Juan 10:10)

Comencemos definiendo abundancia:  Gran cantidad de algo. Prosperidad y buena situación económica.

Ciertamente cuando escuchamos la palabra abundancia, pensamos que abundancia quiere decir que lo podemos tener todo, sin que nos falte nada. Y rápido pensamos en las cosas materiales. 

Pero… si analizamos que esto es algo que dijo Jesús y está registrado en la Biblia, tenemos que detenernos y pensarlo dos veces. 

Porque a veces lo que vemos a simple vista no es la repuesta correcta. A veces nuestros conceptos están errados porque los vemos a través del filtro de la sociedad y no del Reino de Dios.

Y si bien es cierto que Dios nos puede bendecir con abundancia de bienes, hay cosas mucho más valiosas que el dinero que nos traen felicidad y paz.

Una vida abundante puede ser:

una larga vida

una vida llena de felicidad

buena salud 

el amor de la familia, los hijos y nuestra pareja.

Una vida abundante puede ser una vida llena de servicio a los demás, debido a la satisfacción tan hermosa que nos produce el dar y ayudar a otros. 

Una vida abundante puede ser una vida ministerial, donde vivas para llevar a otros el mensaje de salvación.

Una vida abundante puede ser la vida de una ama de casa que cuida con esmero y amor a su familia.

Pero te pregunto, ¿Qué es para ti vivir en abundancia? ¿Cómo puedes ver la abundancia en tu vida?

La abundancia puede ir mucho más allá del aspecto financiero. Puede abarcar la salud, el tiempo, el amor y el éxito. Ciertamente una persona puede tener abundancia económica y, al mismo tiempo, experimentar escasez de tiempo con las personas que ama o carencia de relaciones afectivas reales y carencia de una vida espiritual. No podemos pensar que la prosperidad se mide en cifras porque así pueden hacerlo en el mundo, pero en el Reino de Dios la prosperidad se mide de manera diferente.