[Grandes Versos] Principios De Vida De SantiagoMuestra

Elías era un hombre con una naturaleza como la nuestra

Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses.

¡Guau! No llovió durante tres años y medio. Entonces Elías ora por la lluvia y los cielos se abren. ¡Qué oración! ¡Qué influencia con Dios! ¡Qué potencia! Y pienso: «Bien, eso es porque es Elías. Elías era especial. Elías era diferente. Elías fue uno de los profetas más poderosos de la Biblia. Elías ni siquiera murió, solo ascendió hasta Dios». 

Entonces, mis oraciones nunca podrían tener el efecto que tuvieron las oraciones de Elías, ¿verdad? Tal vez tú también pienses eso. ¿Por eso Dios inspira a Santiago a dar el ejemplo de la oración de Elías? ¿Para que reconozcamos que nuestras oraciones nunca podrían hacer eso? Lo dudo. No creo que ese sea el corazón de Dios en absoluto; de hecho, sé que no lo es.

Dios, sabiendo que todos pensábamos que Elías era excepcional y especial, comienza el ejemplo con estas poderosas palabras: «Elías era un hombre con una naturaleza como la nuestra». ¿Qué nos dice Dios aquí? ¿Podría Dios decirnos que nuestras oraciones pueden hacer lo imposible, lo inaudito, lo milagroso? ¿Necesito ver el poder de la oración de una manera completamente diferente? ¿Necesito orar con audacia y expectativa que nunca había tenido antes?