FCA El Centro Muestra

En sus marcas:

“Digo, pues: Vivan según el Espíritu, y no satisfagan los deseos de la carne” Gálatas 5:16 (RVC)

Listos:

Cuando confías en Jesús con toda tu vida, Dios te hace una nueva persona. No te aferras al viejo pecado, la culpa y la mentalidad del pasado. Tienes una nueva identidad en Cristo. Tu transformación puede ser descrita con tres principios:   

• Dios te hace a nuevo —esta transformación requiere un cambio de mentalidad, debes dejar la mentalidad vana de solamente sobrevivir. Como creyente en Dios, el deporte no es un pedestal sino una plataforma. Dios te ha dado la habilidad de glorificarle. Cuando veas los deportes como una oportunidad para impactar a otros, Dios será glorificado y vidas serán transformadas.    


• Dios está contigo —Dios está siempre contigo. A través de su Santo Espíritu, Dios te guía. Te das cuenta que el Espíritu Santo está obrando en ti cuando tus emociones, acciones y palabras reflejan en el exterior el cambio que está pasando en tu interior. La Biblia llama a esto el fruto del Espíritu.    


• Dios te guía —Mientras el Espíritu Santo viva en ti, Él te guiará. Él te guiará a través de las escrituras, la oración, el discipulado (compartir el amor y mensaje de Dios con otros) y con cualquier circunstancia que te encuentres. Recuerda, no estás solo con Dios, Él está siempre contigo.

Mientras camines con Jesús en tu vida, notarás que tu vida comienza a transformarse. Recuerda confiar en Él y glorificarlo en todo lo que tú haces. Tienes la oportunidad de ejercer una gran influencia como atleta. Cuando hagas un impacto a través de Cristo primero, ¡Le estarás dando Gloria a Dios!

Fuera:  

1. ¿Alguna vez le has pedido a Dios dirección en tu vida? Describe cuando.    


2. ¿Cómo podría impactar el Espíritu Santo la manera en que compites?    


3. ¿Cómo puedes hacer que el deporte sea una plataforma para tu fe y no un pedestal?

Entrenamiento:

Gálatas 5:22-25

Juan 16:13

Tiempo Extra:

“Padre, gracias por nunca abandonarme. Ayúdame a entender eso cuando me encuentre en tiempos difíciles. Ayúdame a confiar solamente ti y glorificarte con mi vida. Amén”