Pedir, Recibir, AgradecerMuestra

Dia 05 - Dios desea aún más que nosotros que nuestras oraciones se hagan realidad, porque El nos ama y quiere colmarnos.

Reflexiones : 

Lea Isaías 55:8-11 y tome un momento para contestar las siguientes preguntas: 

 ➤     Porqué Dios desea tanto escucharnos?

 ➤     Lea Juan 11:41-41. ¿Qué me impide creer que Dios siempre quiere escucharme y como enfrentar esta incredulidad?

Contenido :

Hace unos años, estaba orando por una enfermedad y sabes que nuestros pensamientos pueden flaquear a veces mientras oramos. Eso exactamente fue lo que sucedió: Mientras yo oraba por la sanidad, me encontré pensando en lo que iba a decirle a este hombre si no era sanado…Fue entonces cuando me di cuenta de que tenía un problema. Por un lado, oraba por un milagro y por el otro esperaba que no pasara nada. No hace falta decir que inmediatamente me arrepentí y realineé mi corazón y mi fe al poder y al amor de Dios. Sin embargo, a menudo es así como suceden las cosas cuando oramos. Lamentablemente muchas personas han aceptado como norma que no se responda a sus oraciones. La respuesta a la oración se ha convertido en algo excepcional… Llegamos a la oración por deber, sin convicción real y nuestras oraciones terminan con “que se haga Tu voluntad”, en realidad, sin una sumisión real a Dios, sino para expresar una especie de fatalismo. Guardemos siempre estas verdades: por una parte, la oración es un dialogo con Dios, por otro lado, Él siempre quiere respondernos y finalmente recibir respuesta es la norma de la oración.

Dios nos ama con amor perfecto y descubrimos este amor extraordinario que Dios ha tenido por sus hijos, desde el comienzo del Genesis. Al colocar a Adán y Eva en el Jardín del Edén, Dios los colmo de abundancia. Ellos tenían todos los árboles frutales que necesitaban a su disposición, el rio fluía en el jardín, ellos estaban en comunión constante con Dios, ellos fueron creados el uno para el otro, toda la creación les fue dada y estaban en un lugar de delicias. Esto revela la naturaleza de Dios que desea dar lo mejor a Sus hijos y en abundancia. Y eso es lo que desea siempre para nosotros hoy. Entonces cuando oramos, asegurémonos de tener esta comprensión de Dios en nuestros corazones y saber que Él es el Dios que vino para darnos la vida y la vida en abundancia. El que desea nuestra destrucción y nuestra infelicidad es el diablo (Juan 10:10). Sin embargo, nada puede evitar que Dios nos bendiga, porque en Cristo todas nuestras oraciones son respondidas (Colosenses 2:10). Dios desea bendecir abundantemente, Él se interesa en todas las áreas de nuestra vida y desea cumplir los milagros sin restricciones.

Es importante recordar que no siempre la respuesta es instantánea, porque Dios tiene una visión en el tiempo. Job es un buen ejemplo: él era muy bendecido en todos los aspectos de su vida, sin embargo, su vida fue profundamente probada, hasta el punto de que perdió todo, excepto su esposa y su propia vida. Algunos historiadores bíblicos creen que Job sufrió durante varias décadas…Dios respondió la oración de Job, permitiéndole recuperar no solo todo lo que había perdido, sino que lo recibió doble. Dios quería bendecirlo doblemente y sobre todo revelarse a él. (Job 42:5). La respuesta a la oración siempre está vinculada a la revelación de quien es Dios y hace posible manifestar Su gloria.

A veces tendemos a evaluar vuestras bendiciones y respuestas a oraciones comparándolas con lo que hemos recibido durante un periodo de nuestras vidas, sin embargo, no debemos perder de vista la paciencia de Dios y sus propósitos a largo plazo para nuestras vidas y para las personas que nos rodean. Si El realmente quiere bendecirnos y colmarnos, lo que Él quiere, sobre todo, es que estemos en comunión con El. De que nos serviría nadar en el bienestar material y estar siempre y estar siempre satisfechos, si terminamos nuestra vida lejos de Dios, ¿porque en medio de todas estas riquezas hemos perdido contacto con Aquel que es la fuente de la bendición? Dios es nuestra mayor bendición y Su presencia es sin duda lo más importante. 

Ver nuestras oraciones respondidas nunca es automático, es simplemente el resultado de nuestra relación con Dios. Cuando estamos en comunión con El, no podemos vivir más que siendo bendecidos, incluso en medio de las circunstancias más difíciles. Y la respuesta a la oración siempre tiene como objetivo la gloria de Dios.

Cuando yo ore por esa persona enferma, tu como yo, ¿tienes la impresión de que la respuesta a la oración es una excepción? Entonces, yo desearía animarte a tomar un momento para arrepentirte, pedir perdón a Dios por esa incredulidad y para que elijas orar con estas palabras que se encuentran en Juan 11:41 “Padre gracias te doy por haberme respondido” Una vez que la oración es dicha, cree que esta hecha y se hará realidad en el mundo visible…Esto es orar con fe.

Mi decisión

Lo que comprendí para mi vida personal :

Lo que decido para mi vida, con lo que acabo de aprender :

Lo que tú decides hoy, determina quien serás mañana :

Del libro "un disciple en marche" copyright 2018 de Luc Favre, publicado por Vie Victorieuse. Todos los derechos reservados.