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Jesús: Completamente Dios y completamente humano

Jesús es completamente Dios: "En el principio ya existía el Verbo [Jesus], y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios" (Juan 1:1 NVI).
Jesús es completamente humano: "La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús, quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la naturaleza de siervo y haciéndose semejante a los seres humanos. Y, al manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz!" (Filipenses 2:5-8 NVI).

Tener creencias esenciales correctas no se trata de "estar en lo cierto" sino de "estar alineado'' con Dios. Tal como un tomacorriente debe alinearse con el enchufe para funcionar bien, debemos alinearnos con las realidades del universo, como Dios las describe.

La próxima vez que alguien diga: "¿Quién dice quién es Jesús?" podemos responder con esta simple verdad: "¿Qué hay de Jesús? ¿Qué tal si dejamos que las palabras que Él habló respondan esa pregunta?" Jesús respondió esta pregunta de muchas maneras, con muchas palabras y acciones. Una vez, preguntó a Sus doce amigos más cercanos quién creían que Él era.

Esto se encuentra escrito para nosotros en el Evangelio de Mateo, capítulo 16. Jesús pregunta: '—Y ustedes, ¿Quién dicen que soy yo?' (vs 13-15). Estos discípulos sabían que Jesús decía ser el único camino al cielo y la vida eterna (Juan 14:16). También sabían que tenía el poder para hacer milagros y conocían a miles que comenzaban a creer que Jesús era Dios.

Es interesante en esta conversación que Jesús utiliza la frase "Hijo De Hombre" para referirse a sí mismo. El uso de este título enfatizó que Él es completamente humano. Eso podría verse como una referencia extraña para una persona normal: Mírenme, soy humano. Pero si has sido Dios todopoderoso en el cielo por toda la eternidad, y ahora estás en la tierra como un humano, tal vez sería más probable decir: "Mírenme, ¡soy humano!". Esta era la forma preferida de Jesús de referirse a sí mismo.

Volviendo a la pregunta, Pedro responde directamente. Miró a Jesús a los ojos y dijo: "Eres el Cristo, el Hijo del Dios Viviente" (Mateo 16:16).

¿Por qué nuestra creencia acerca de Jesús debe alinearse al ejemplo que Él describió? ¿Por qué necesitamos entender esta creencia correctamente?