Perseverando en Medio Del CaosMuestra

Conociendo Los Tiempos

La Palabra de Dios es nuestra guía en toda situación y en todo tiempo. Estamos viviendo en unos tiempos de mucho caos a nivel mundial. Independientemente de lo que podamos enfrentar en estos tiempos, nunca debemos olvidar que somos más que vencedores por medio de Aquel que nos ama. 

Es importante fortalecernos en la Palabra de Dios para poder perseverar en estos tiempos. Necesitamos conocer los tiempos en que vivimos. Las Escrituras hablan de los hijos de Isacar. Ellos eran entendidos en los tiempos, ellos eran hombres sabios y conocían la ley de Dios. Debemos adquirir conocimiento y sabiduría de Dios para que nadie nos engañe. La Palabra nos advierte de los tiempos venideros y del carácter de la gente en los tiempos del fin. Nada debe tomarnos por sorpresa ya que todo esta escrito para alertarnos. En estos tiempos difíciles Dios quiere que te acerques a Él. 

Para poder perseverar debemos guardar dos cosas: la mente y el corazón. La mente es el campo de batalla. La mente es la computadora donde se guarda toda la información que recibimos de nuestros sentidos. En la mente están los pensamientos. Todo lo que usted ve, escucha y habla la mente lo va grabando y guardando en el disco duro. Nuestro alimento espiritual viene por lo que vemos y lo que escuchamos. Muchos son los pensamientos en el corazón del hombre ya sean buenos o malos. Somos producto de nuestros pensamientos y nuestros pensamientos pueden estar desalineados. Todo comienza con un pensamiento, luego el corazón lo percibe y por último la carne los ejecuta dando a luz el pecado. Sin duda los pensamientos nos afectan en cómo nos desenvolvemos con los demás, y también afecta el modo en que vivimos el día a día. Debemos llenarnos de la Palabra de Dios y llevar todo pensamiento cautivo a la obediencia a Cristo. 

También debemos guardar el corazón porque de él mana la vida. Las heridas del corazón afectan todas las áreas de nuestra vida y también afecta las relaciones con los demás. No permitas que tu corazón se endurezca a causa de los que hacen el mal. Dios sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas. Él siempre guardará a sus hijos aun en medio de cualquier situación que tengan que atravesar. 

Oración:

Señor, necesito de tu sabiduría. Señor ayúdame a guardar la mente y el corazón, que nada de lo que pueda vivir, vea o escuche dañe mi corazón. Que tu paz inunde mi ser. ¡Amén!