Abrumada por mis benediciones (Parte 4)Muestra

NO ERES SUFICIENTE

¿Cómo podré enseñarle a mis hijos todo lo que necesitan saber? ¿Y si los tengo en la escuela equivocada, o si pierden algún deporte en el cual pueden sobresalir?  ¿Qué pasaría si se suponía que fueran músicos y no tuviéramos los medios para que tomaran lecciones? ¿Y si no soy suficiente para ellos? ¿Qué pasaría si los arruino?

Tú eres la madre. Eres quien debe estar ahí para ellos y asegurarte de que vayan por el camino correcto y no fallen. ¿Cierto?

Nuestra ansiedad y miedo interminable de ser la madre correcta, que cubre todas las bases, y provee las oportunidades correctas es agotador. Esperamos que no tengan que pasar su años de adultez en el sofá de un terapeuta por causa de nosotras. Es abrumador y nos deja cuestionándonos el futuro.

De alguna manera, hemos estado condicionadas a creer que una madre es todo  y que debemos ser perfectas. Sabemos que ni siquiera nuestras propias madres lograron esa expectativa, aún así tenemos la idea de que seremos distintas. Mejores.

Espera. Tengo buenas noticias para ti: no eres suficiente.

¿Salió el aire de tus pulmones? Respira profundo y di conmigo, “No soy suficiente para mis hijos”.

Eso está bien. Está más que bien, y aquí está el por qué: si fuéramos suficiente para nuestros hijos, ¡ellos no necesitan de Jesús! Nuestros hijos nos fueron dados por un corto periodo de tiempo para demostrarles Su amor, para que les enseñemos Su manera y que le criemos hacia donde tienen que ir—¡hacia Él! Es un llamado muy grande, más que cualquier otro.

Las buenas noticias son que Él ama a nuestros hijos más de lo que nosotros podemos, lo cual nos resulta imposible. Será Él quien se asegure de que ellos aprendan lo que necesitan. Porque ¡Él es suficiente!

Ahora, ¡solo espero que esta declaración y realización te ofrezca una nueva libertad! Anótalo en un papel que veas muy a menudo: ¡Yo no soy suficiente, pero Él sí lo es! Deseo que pares de castigarte y de cargar culpas, y que en su lugar comiences a caminar en libertad desde hoy. 

“No hay vocación más alta en la vida que la tarea de tener y criar a los hijos los cuales Dios ha confiado a nuestro cuidado."~ Dr. James Dobson

Padre, gracias por ser suficiente. Ayúdame a descansar en esa verdad, a creer que Tú eres quien está haciendo el camino para mis hijos, inclusive ahora. Ayúdame a vivir en la libertad de que no soy suficiente, pero que ¡Tú eres más que suficiente! Que tu paz y presencia inunde mi corazón y pueda descansar en Ti, confiando en Tí el futuro de mis hijos.