Intimidad con DiosMuestra

Puedes tener tanto de Dios como quieras. Esta declaración no significa que un ser humano finito pueda comprender a Dios o agotar las profundidades de Su amor, pero sí significa que no hay límite en la medida en que podamos crecer en nuestro entendimiento y amor por Él.

A lo largo de las Escrituras, se nos recuerda como el pueblo de Dios que somos amados y declaramos el asombroso mensaje de que Dios nos da la capacidad de amarlo. De hecho, es por eso que fuimos creados. Nuestro propósito principal en este mundo es amar y adorar a Dios.

La vida, desafortunadamente, tiene una forma de distraernos de esta verdad. Al igual que un estafador distrae a su víctima con una actuación en la calle mientras sus carteristas cómplices hacen lo suyo, nos divierten las distracciones de la vida mientras nos engañan en cuanto a lo que realmente está sucediendo.

La vida buscará desviar tu atención, pero dedicar tiempo, energía y recursos te ayudará a cultivar una relación íntima con Dios. Los hombres y las mujeres que deseen tener esta relación íntima con Dios lo harán su primera prioridad; querrán tener la mayor cantidad de Dios posible.