Lo Bueno de Lo MaloMuestra

"Lo bueno de lo Malo" 

Siempre me he identificado a lo largo de mi vida, con la historia de José en la Biblia.
Fue vendido por sus hermanos para que fuera esclavo, y desde su niñez hasta los 30 años, vivió muchas situaciones "malas".
En Génesis 50:20, José hace una de las declaraciones que más han impactado mi vida, y le han dado una razón a tanta situación difícil que he atravesado. “Todo lo malo que ha sucedido, Dios lo ha transformado para nuestro bien, con el fin de ayudar a muchas personas”.

Todo lo malo que nos sucede tiene un propósito, y Dios es bueno. Entonces si agregamos a Dios en la ecuación: MALO + BUENO (DIOS) = Milagro y Propósito. 

El propósito de este plan, es darte mensajes de ánimo y algunos consejos que puedan ayudarte a sacar provecho de todas las situaciones malas o difíciles que has atravesado, y que están por venir.
Nadie está exento de los problemas, pero ¿qué hacer cuando éstos llegan?
 

Algunas situaciones difíciles sabemos que en determinado momento las tendremos que enfrentar, como por ejemplo, sabes que tus padres no estarán para siempre en esta tierra. Aunque en este momento no quieres pensar en ese día, debes ser consciente que un día recibirás la mala noticia que ya no estará.
Pero hay otras situaciones que nos llegan de sorpresa, nunca las imaginamos, o nunca las esperamos. Una enfermedad terminal, cáncer, un accidente y otros.

Todo eso malo, que en determinado momento no le encontramos un sentido, cuando Dios interviene lo transforma en bueno, y nos da un propósito.

Te dejo con algo que llenará tu alma. 

En varias ocasiones la vida ha hecho que sintamos un nudo en la garganta, pero ¿qué hacer cuando el nudo se siente en el alma? Con asuntos del alma sólo conozco a alguien que puede ayudarte, y ese es Dios.

Hay luchas en la vida que dejan a tu corazón sin una razón para seguir. Heridas que a lo mejor han dejado miedo, y cuándo miras atrás, el dolor del ayer te hace llorar. Miras a tu alrededor, y aunque hay muchas personas, te sientes solo, muy solo.
Empiezas a sentir que tus sueños se desvanecen, el futuro que un día creíste que llegaría, ahora se ve borroso. 

Hoy quiero decirte que, aunque la tormenta no pare, aunque la vida te esté quitando y quitando, hay alguien allá arriba, que cuida de ti, alguien que está para ti, y lo que estás pasando está por terminar. Y muy pronto todo eso “malo” que has vivido servirá para que puedas bendecir a muchas personas.