Blending a Family - Oficio religioso de 40 díasMuestra

Día 7 

Oficio religioso

Hijos de Hogares Rotos

Este oficio es sobre los niños de padres divorciados y aquello que han perdido a un padre por fallecimiento. Léalo para que entiendan cómo usted puede ser su defensor.

A continuación, siguen comentarios de dos de nuestros niños que ahora son adultos:

"El divorcio que viví fue doloroso, que incluyó una pelea por la custodia, diferencias religiosas, un deseo de aceptación, sentimientos de exclusión por la nueva familia de mi papá e incomodidad con respecto a las relaciones. Tener que vivir todo esto me dejó como resultado una crisis de identidad hasta los primeros años de la edad adulta".

"Cada niño vivirá el divorcio de manera diferente, porque cada niño es diferente. Yo asumí el rol de cuidador de mi hermana menor. Mi actitud era "debes crecer rápido". Los niños pequeños necesitan saber que sus padres les sostienen la mano en la vida. Si no sienten eso, creerán que causaron la debilidad de sus padres".

Los padres que se enfrentan al dolor debido a un hogar roto pueden pasar por alto el dolor del niño. Los adultos tienden a creer que los niños se recuperan, pero sienten el dolor al igual que nosotros.

Qué hacer y qué no hacer para ayudar a los niños que sufren

1. Comuníquese con sus hijos. Pregúnteles cómo se sienten y qué escucharon. Permita que los niños se expresen sin sorprenderse ni repercusiones.

2. A menudo, los niños más grandes no se abren con sus padres. Identifique a un equipo para que puedan escuchar y con quienes puedan hablar en sus vidas: amigos, pastores, consejeros. 

3. Dígale a los niños que el divorcio no fue su culpa. Fue una decisión de los adultos.

4. Busque su sanación. Si no estamos saludables, nuestros niños no estarán saludables. 

5. Pídales perdón por sus heridas, incluso si no las causamos. 

7. Dé el ejemplo de lo que queremos ver en nuestros niños. Los niños harán lo que hacemos nosotros. 

8. Ayude a los niños a establecer sueños y metas realistas. 

9. Rece por nuestros niños y con ellos todos los días. Dios es su salvador.

10. No permita que los niños sean nuestro apoyo.

11. No diga palabras negativas sobre sus otros padres biológicos.

12. No elimine normas ni disciplina.

Sugerencias:

Pregunte a los niños qué sienten.

Ayude a sus niños a procesar todas las emociones. Celebre lo positivo y rece con ellos sobre lo negativo.

Nuestra oración para ustedes:

Padre, gracias por curar y restaurar lo que se perdió, por cubrir las necesidades de esta familia y sanar las heridas. Trae nuevas esperanzas y sueños a Tus preciados hijos. ¡Interviene, Señor!