Pasar por tiempos difícilesMuestra

La sala de espera

Todos hemos escuchado la frase "mientras tanto" al esperar algo. Cuando estamos en la sala de espera, el "mientras tanto" que ansía nuestra sanidad o nuestro milagro es a menudo bastante cruel, ¿no? 

Así que, ¿qué hacemos en el mientras tanto? ¿Cómo mantenemos nuestra fe y confianza de que Dios está trabajando cuando no podemos verlo? Aquí hay algunas sugerencias para quienes esperamos en nuestra lucha:

Adórale en tu dolor

Una de las cosas más importantes que podemos haces en nuestro sufrimiento es alabar a Dios. Él es digno de eso todos los días. ¿Cómo no hacerlo? Si pensamos en todo lo que ha hecho por nosotros y la eternidad que pasaremos con Él. Enfócate en los atributos de Dios: Él es infinito, inamovible, todopoderoso, perfecto, misericordioso, bondadoso y omnipresente todo el tiempo. Le damos la gloria a Dios y lo adoramos antes de salir de una prueba o de recibir el resultado deseado.

Sigue ejercitando

En el medio del dolor, quizá solo veas debilidad de tu parte, y no ves los músculos espirituales que están creciendo o cuán fuerte te vuelves. Pero con cada repetición de oración, adoración, lectura de la palabra de Dios y confiando en Sus promesas, tu espíritu se fortalece. Es en nuestra debilidad que Su fortaleza se perfecciona. Muchos dicen que las pruebas nos hacen o nos deshacen.
Cree en que las tuyas te están haciendo.

Derrama tu corazón

Todo el dolor que cargas no le asusta a Dios. Definitivamente puede manejar tus dudas, miedos e incluso tu enojo. Solo sigue acudiendo a Él. Las pruebas pueden hacer que nos aferremos a Cristo o huyamos de Él. Aférrate a Cristo. Quizá no comprendas por qué estas dificultades aún están presentes en tu vida. Ahí es donde pones en práctica la verdad que has aprendido cuando las cosas no eran complicadas. Es una constante rendición y confianza.

Ten presente la eternidad

Debemos tener nuestro ojos fijos en la eternidad. Centrarnos en lo que se ve es enfocarse en lo temporal. Es lo invisible, la manera que Dios trabaja detrás de escena, lo que es eterno. Dios está logrando algo en nosotros, a través de nosotros, para nosotros y sí, incluso con nosotros. Elijamos mostrar paciencia mientras vemos su perfecta linea del tiempo ocurrir. 

Mientras sobrellevas tu temporada de sala de espera, no temas en mirar hacia atrás y observar tu proceso. Porque has progresado. Y luego, sigue tomando el siguiente paso. Nunca sabrás cuándo verás un quiebre en tus nubes bajas espirituales. El día que pienses que no puedes más, puede ser el día de tu avance. 

Reflexión

• Si estas en la sala de espera de tu vida, pídele a Dios que te muestre algo que está logrando en y a través de ti cada día. 


• Para la lectura de hoy, ¿qué versículo o pasaje resuena más contigo? Escribe lo que piensas.