Viaje al pesebreMuestra

La encarnación 

La creación de Adán es la porción más famosa de la obra de arte de Miguel Ángel en el techo de la Capilla Sixtina. Adán acostado en una superficie plana, mientras Dios, desde las nubes, extiende su dedo creativo hacia el primer hombre. Adán extiende su mano hacia Dios y sus dedos casi se encuentran, pero no se tocan. 

Compare esta imagen con la belleza de la encarnación: Dios hecho carne, no solo para acercarse a su creación, sino también para vivir como uno de nosotros, humano por completo y divino por completo. El término encarnación quizás parezca un vocablo teológico formal, pero en realidad es una palabra que representa una intimidad maravillosa.

Jesucristo se convirtió en bebé, luego en niño, luego en adolescente, y luego en adulto, para que pudiera relacionarse de manera estrecha con nosotros en todas nuestras facetas. No hay sacrificio que se compare con el suyo. 

Actividad: Pase tiempo a solas al aire libre. Contemple cómo la vida terrenal de Jesucristo permite que Él se relacione con usted.