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Jesús quiere llenarnos

Por Robert Morris

Un día en que los discípulos de Jesús fueron a la ciudad a comprar comida, Jesús encontró a una mujer samaritana junto al pozo y le dijo: "Dame un poco de agua". Su pedido asombró a la mujer. Juan 4:9 nos cuenta su conversación. Ella respondió, "¿Cómo es que tú, siendo judío, me pides de beber a mí, siendo yo una mujer samaritana? –porque los judíos no se tratan con los samaritanos–". En el versículo 10, Jesús respondió, –"Si conocieras el don de Dios y quién es el que te dice: «Dame de beber», tú le hubieras pedido a él y él te habría dado agua de la vida". Ella dijo "Señor, no tienes con qué sacar y el pozo es hondo. ¿De dónde, pues, tienes el agua viva?”

Notemos que aquí hay dos conversaciones: una natural y otra espiritual. "Eres tú mayor que nuestro padre Jacob," preguntó ella, "quien nos dio este pozo y quien bebió de él, y también sus hijos y su ganado?" Jesús dijo, "Todo el que bebe de esta agua volverá a tener sed. Pero cualquiera que beba del agua que yo le daré será en él una fuente de agua viva que salte para vida eterna. La Nueva Traducción Viviente reemplaza la palabra "fuente" por "un manantial que brota con frescura". ¿Qué piensas cuando escuchas esas palabras? Yo pienso en agua clara, fresca. Una inundación, al contrario, trae a la imaginación un sucio, y turbio pantano.

Como hemos aprendido en estos días, la Palabra de Dios es un manantial de agua de vida. Cuando Jesús habla de "un manantial que brota agua de vida eterna, Él está hablando de la Palabra de Dios". Apocalipsis 22:1dice que un río de la Palabra de Dios fluye del trono de Dios. El versículo 17 dice: "El que tiene sed, venga. El que quiera, tome del agua de vida gratuitamente".

¿Tienes sed del agua de vida? Te gustaría tener un fresco y burbujeante manantial de vida eterna dentro de ti cada día? Quizás ahora estés deshidratado. Quizás el diablo te ha estado inundando con mentiras tóxicas y está haciendo padecer hambre a tu espíritu al robarle la Palabra de Dios. Aquí hay buenas noticias: Dios quiere calmar tu sed ahora mismo; quiere saciarte y quiere hablarte. Todo lo que tienes que hacer es meditar en Su Palabra.

Oración

Dios, estoy muy sediento de Tu Palabra; cuando la leo, dame ese manantial del agua de vida fresco y burbujeante. Satanás me ha estado inundando con mentiras y tentación, necesito ser llenado por Tu Palabra. En el nombre de Jesús, amén.

Versículo para memorizar

En mi corazón he guardado tus dichos para no pecar contra ti. Salmo119:11