Identifica y derriba las fortalezas mentales Muestra

Tipos de fortalezas mentales

Segunda fortaleza mental

Luchamos con fortalezas mentales porque nuestra tendencia es generalizar, es decir, etiquetamos, marcamos a las personas. Por otro lado, la mayoría de nuestras costumbres fueron arraigadas de manera generacional, por eso es importante detectar qué fortalezas mentales tenemos por ser de cierta familia, país o ciudad.

Tercera fortaleza mental

La costumbre de juzgar y criticar es una fortaleza mental por derribar, pues solo Dios revela las intenciones de nuestras acciones. Otras fortalezas son la amargura y el resentimiento, así que después de perdonar, es importante renovar la mente. No obstante, en vano pasamos horas renovándola y permitiendo que Jesús entre a esas áreas que nos duelen, si no cambiamos los pensamientos que tenemos de los demás. Si no cambiamos nuestra manera de pensar, ¿para qué perdemos tiempo perdonando?

Así mismo, existen personas con fortalezas mentales que no podrán casarse porque vieron un mal ejemplo de matrimonio o no podrán ser buenos padres porque nunca identificaron esa figura en su vida.

Cuarta fortaleza mental

El enemigo pone pensamientos en nuestra mente contra Dios que debemos derribar; argumentos en contra de personas que debemos ver como una bendición, no como una amenaza. Aprendamos a escuchar los comentarios que nos hacen, son complemento y no oposición; detectemos los argumentos contra otros o nosotros mismos; ¿cuántos «no puedo» hay en nuestras  vidas? No hay nada que no podamos hacer porque todo lo podemos en Cristo que nos fortalece. Las fortalezas mentales nos impiden alcanzar objetivos, en cambio, si pensamos que lo lograremos, ¡así será! 

Quinta fortaleza mental

¿A qué tememos? ¿A estar en un lugar cerrado, a la oscuridad, a que nos hagan daño, a lo que piensan de nosotros, a las alturas, a las multitudes…?