7 cosas que la Biblia dice sobre el matrimonioMuestra

Hace diecinueve años, cuando conocí a mi esposa, no estaba exactamente pensando, ¡Guau! Esta chica realmente teme al Señor. No, me fascinaba su cabello rojo oscuro y su sonrisa contagiosa. Ella estaba fuera de mi liga. Ella lo sigue estando. Cuando me presenté en la puerta para esa primera cita a ciegas, yo era un pequeño nerd escuálido que se quedó sin habla frente a la chica más hermosa que jamás había conocido. Y por la razón que sea, ella se enamoró de mí. Años más tarde, yo sigo quedándome todavía sin palabras, a veces; no siempre por ese pelo rojo intenso, sino más a menudo por el fuego dentro de ella. Su belleza no se desvaneció , pero me encuentro cada vez más atraído por sus cualidades intangibles; cosas como su amor a Dios, su desinterés y su generosidad. Creo que es lo que Salomón quiso decir cuando dijo: el encanto es engañoso y la belleza es fugaz. Dudo que alguna vez mire a mi Shelley y no piense que es físicamente atractiva. Pero, los años me han ayudado a apreciar la profundidad de la verdadera belleza anidada detrás de su forma física. Puedo mirar a cada una de nuestras tres hijas y ver la belleza de su madre. Más importante aún, puedo ver el mismo carácter dulce y piadoso que se está forjando dentro de ellas que me mantiene enamorándome de su madre día tras día. Eso es lo que me hace más orgulloso como un marido y un padre. Mi esposa ha sido un regalo asombroso y un compañero de vida invaluable, y sé que Dios está preparando a mis hijas para un futuro donde su valor se medirá más por su refinamiento que por su reflexión. No importa dónde estás en tu viaje, nunca es demasiado tarde para cambiar lo que valoras. Dios mira más allá de nuestra apariencia superficial y mira profundamente en nuestros corazones. No puedes ocultarte detrás de un fundido o hechizar tu camino en Su favor. Entonces, sí. Mi esposa todavía está fuera de mi liga. Ella es mucho mejor para mirar que yo, seguro. Pero ella tiene mucho más. Ella y mi familia nos enseñan qué es la verdadera belleza. Ella me enseña la importancia de preocuparme por la condición de mi corazón. Ese es un rasgo digno de elogio que estoy tratando de ponerme al día con ella.¿Qué estás haciendo para cultivar algo verdaderamente hermoso dentro de tu propio corazón?Michael Martín. Desarrollador Web YouVersion