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La verdad sobre amarte a ti mismo

Los jóvenes cristianos pueden fácilmente ser sus propios peores enemigos a veces al castigarse constantemente por sus fallas. A menudo, tratamos de vivir como perfeccionistas en un mundo caído punteando cada "i" y cruzando cada "t", solo para finalmente quedarnos cortos al final. Eventualmente, llegamos a un punto de ruptura cuando nos damos cuenta de que no importa cuánto lo intentemos, nunca seremos lo suficientemente buenos. El enemigo quiere que pensemos que nuestro valor está ligado a nuestro éxito, lo cual simplemente no es el caso. Es cierto que nunca seremos lo suficientemente buenos por nosotros mismos... pero sabemos que estamos hechos a imagen de Dios y Su poder se perfecciona en la debilidad. Entonces, aunque nuestras fallas pueden hacernos parecer débiles a los ojos del hombre, Dios solo ve una oportunidad de usarnos para Su gloria. ¡Él nos ama y quiere usarnos a pesar de nuestros defectos!

Si el Dios del universo, que no conoce pecado, puede amar a un pecador como tú incondicionalmente, entonces ¿por qué no puedes hacer lo mismo por ti mismo? Mi esperanza es que dejes de lado tu deseo de ser perfecto y adoptes una actitud de humildad y gracia, eligiendo amarte a ti mismo cada día a pesar de tus imperfecciones. Sé por experiencia propia el inmenso peso que se te quitará de los hombros si decides hacer esto. Pasar tiempo en la Palabra de Dios puede ayudarte a comprender mejor Su amor por ti, lo que naturalmente comenzará a influir en la forma en que te tratas a tí mismo. Cuando te ves a ti mismo a través de los ojos de Dios, no tienes que preocuparte constantemente por ser perfecto todo el tiempo. ¡Puedes dejar de enfocarte en ti mismo y comenzar a canalizar toda esa energía mental en amar a los demás! Dios desea que te ames tal como eres y también te respetes lo suficiente como para querer esforzarte por ser más como Jesús.

Ora: Pídele a Dios que te ayude a verte a ti mismo a través de Sus ojos para que puedas mostrarte el mismo nivel de gracia y amor que Él tiene por ti.