Certeza en tiempos de incertidumbreMuestra

No siempre podemos estar seguros de lo que ocurrirá. No se sabe lo que el futuro le deparará a nadie. Podemos adivinar. Podemos asumir. Podemos intentar notar patrones y descifrarlos, pero nadie sabe lo que deparará el mañana. Hoy es todo lo que tenemos.

Y hoy es suficiente.

Has sobrevivido cada día malo hasta ahora. Cada circunstancia y obstáculo. Eres invencible. Has visto situaciones que parecían insuperables y te has enfrentado a terribles oponentes que parecían tener la ventaja, sin embargo, tú has salido victorioso.

En tiempos de incertidumbre, elegimos estar seguros.

No tenemos certeza en nuestras circunstancias y situaciones, sino en nuestro Dios, quien nos provee y nos protege.

Certeza – Convicción firme de que algo es así. La cualidad de ser fielmente verdadero. Un hecho que es definitivamente verdadero o un suceso que definitivamente va a ocurrir.

Incertidumbre – El estado de ser incierto. Algo que es incierto o que te hace sentir inseguro.

La incertidumbre dice: “No sé qué tiene para mí el futuro”.

La certeza dice: “¡Sé quién sostiene mi futuro!”.

Vivir sin Cristo es vivir sin paz. Ser inseguro. Cada persona tiene una conciencia en su interior, la cual debe ser satisfecha antes de poder ser realmente feliz. Hay solo una cosa que puede dar paz a la conciencia y es estar en la relación correcta con Dios.

Pelea por lo que más te importa. Pelea por tu fe. Pelea por tu familia. Pelea por tu vida. No permitas que la negatividad ni la incertidumbre ocupen tu mente. Dios TODAVÍA sigue bendiciendo.

Es tiempo de desalojar la incertidumbre y abrir espacio para la certeza. La negatividad ha excedido su estadía, ¡y la positividad está entrando nuevamente!

Necesitamos presentarle a un mundo incierto, un Jesús seguro.